Como parte del proceso injerencista que lleva a cabo la ultraderecha venezolana, la tarde de este jueves, Senadores Iberoamericanos que están en el país para constatar la “crisis socio-económica”, se encuentran a las afueras de la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en El Helicoide, Caracas, con el objetivo de visitar al exalcalde San Cristóbal, Daniel Ceballos, a quien se le acusa por los delitos de rebelión civil y agavillamiento, por su presunta participación en los hechos de violencias de febrero del año 2014 los cuales ocasionaron numerosas pérdidas humanas.
En este sentido, se pudo conocer que los diputados internacionales se encontraban apostados a las afueras del edifico de seguridad a la espera de que se le fuese aprobado el permiso para poder entrar a visitar a Ceballos y otros “presos políticos”, pero les fue negado.
El senador español, Josep Maldonado señaló que en “un país donde hay políticos presos es un país donde la democracia está gravemente herida”.
Por fin alguien de la derecha apunta el término correcto: “políticos presos”, porque están encarcelados ya que cometieron un delito contra la nación y no “presos políticos” como se suele llamar, haciendo ver que están detenidos por ser políticos.
También, destacó que pretenden visitar este viernes al opositor, Leopoldo López, quien se encuentra recluido en la cárcel militar de Ramo Verde, en el estado Miranda, desde febrero de 2014, quien está acusado por los delitos de instigación pública, daños a la propiedad en grado de determinador, incendio en grado de determinador y asociación para delinquir.
Por su parte, Dionisio García, otro de los senadores, expresó que “nos hubiese gustado poder entrar, pero no vamos a hacer críticas, somos respetuosos con las decisiones… Hubiera dado una buena imagen para el país”.
¿Cuál imagen? Si, esa que el Gobierno bolivariano le ha mostrado al pueblo venezolano al meter presos a estos dirigentes que sólo produjeron luto en el país cuando incitaron a la violencia el pasado febrero del año 2014, donde resultaron muertas más de 43 personas a consecuencia de su plan conspirativo denominado “La Salida”.
Venezuela no necesita de personas extranjeras para resolver sus asuntos internos, así que a la ultraderecha nacional e internacional no le funcionó el guión que hicieron con los expresidentes de otras naciones, que ahora están repitiendo con los Senadores españoles.
(LaIguana.TV)
