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El cierre de la frontera entre San Antonio del Táchira y Ureña se extendió “hasta nuevo aviso”, luego que efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) fueran agredidos el pasado martes, esta situación caldeó los ánimos en la frontera.

 

Presuntos paramilitares, este lunes, amenazaron a comerciantes de San Antonio a no abrir sus negocios. Ante la desobediencia el gobernador bolivariano de la entidad tachirense José Vielma Mora, dijo que no permitirá un “toque de queda comercial”, en la frontera colombo-venezolana.

 

Aseguró que los vendedores colombianos gozan de todas las garantías en territorio venezolano, por eso deben abrir sus establecimientos en la frontera.

 

Para “restablecer el orden” en Táchira, el presidente Nicolás Maduro anunció estado de excepción en los municipios: Bolívar, Ureña, Junín, Capacho Libertad y Capacho Independencia.

 

Ante la demolición de viviendas improvisadas en el límite fronterizo, el mandatario regional explicó que las autoridades asignarán a las familias a una nueva solución habitacional. Recordó que en su gestión ha entregado más de 20 mil viviendas en el marco de la Gran Misión Vivienda Venezuela (Gmvv).

 

En su cuenta en Twitter @VielmaEsTachira tuiteó este lunes “El PUEBLO está FELIZ por lo que hacemos con la #OLPEspecialTáchira la oposición está triste #BastaDeParamilitarismo”.

 

En este sentido Vielma Mora ha retwitteado a ‏@Elduque024: “@VielmaEsTachira Comerciante que no abra sus locales debe ser fuertemente sancionado porque están jugando a desestabilizar la Nación. Mano dura”.

 

(LaIguana.TV)