Ni la vestimenta para asistir a clases escapa de la especulación. La Superintendencia de Precios Justos (Sundde), volvió a dar un golpe duro a la mafia de revendedores, esta vez a una franquicia de ropa, propiedad de un ciudadano de origen libanés, en Acarigua, estado Portuguesa, donde se decomisaron 32 mil uniformes escolares.
El superintendente de Precios Justos, César Ferrer, explicó este miércoles que tras una fiscalización a tres tiendas, pertenecientes a un mismo dueño hallaron más de 61 mil piezas de ropa infantil además de los uniformes a precios exorbitantes.
El dueño no poseía factura legal de la mercancía exhibida en los establecimientos, por tanto se presume la adquisición por contrabando de extracción. Se emitió una orden de captura contra el libanés, por delitos de acaparamiento, especulación, boicot y contrabando.
La mercancía fue decomisada y los locales fueron ocupados de manera temporal mientras el Ministerio Público toma las acciones correspondientes. Ferrer garantizó que la fiscalización continuará para que padres y representantes puedan comprar a precios justos.
(LaIguana.TV)
