El pasado jueves 5 de noviembre, los cancilleres que integran la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) acordaron el envío a Venezuela de una Misión Electoral; el objetivo de la misma será acompañar los comicios parlamentarios que se celebrarán el próximo 6 de diciembre. Según el secretario general del organismo, Ernesto Samper, la delegación estará conformada por 50 o 60 personas y se regirá por el principio de imparcialidad, objetividad, independencia, legalidad, transparencia y no injerencia.
Este tipo de comisiones la conforman, por lo general, magistrados y altos funcionarios de gran experiencia sobre el tema. También la componen diversos técnicos y especialistas calificados en el área. Todos ellos provenientes de los órganos rectores en materia electoral de cada país miembro. La misión, cabe destacar, estará encabezada por un titular o representante especial y la misma se regirá por los cronogramas acordados en un plan de actividad propio.
La Misión Electoral, es necesario indicar, tendrá dos instancias principales: la primera estará dirigida por el titular o representante especial (elegido por consenso entre los cancilleres de Unasur) y la segunda encabezada por el coordinador general (nombrado por el Consejo Electoral de dicho organismo). Este último desarrollará tareas referentes al área técnica. Luego de realizados los trabajos respectivos (antes, durante y después de los comicios) la misión entregará un informe final con sus observaciones.
Esta delegación, por cierto, será la décimo séptima que enviará Unasur a un evento electoral (y también es la cuarta que viene a Venezuela). La primera la conformó el organismo en 2011. Entre los países que este grupo de expertos ha visitado se encuentran Bolivia, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú y Suriname.
No han sido pocos los representantes de la derecha venezolana los que se han opuesto a la presencia de este tipo de grupos en nuestro territorio. Muchos, entre ellos el secretario ejecutivo de la autodenominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Jesús «Chúo» Torrealba, se han referido a la supuesta incapacidad de esta misión y han hecho énfasis en la reticencia de las autoridades de algunos países miembros a participar en la misma. «No quieren estar en un operativo bufo», señaló Torrealba al respecto.
No obstante, luego de la aprobación efectuada por los cancilleres, el propio “Chúo”, contradiciendo sus previas afirmaciones, expresó lo siguiente: «Aquí va a venir la Unasur, una Unasur distinta, una Unasur que no viene a hacer comparsa, una Unasur que en efecto viene a verificar que existan las garantías necesarias».
Al respecto, la propia presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, declaró que este tipo de acompañamientos deben realizarse «en el marco de los valores de la unión, cooperación, respeto y respaldo a la democracia». Lo más importante, señaló, es «el respeto a la soberanía y al pueblo de Venezuela, que es a fin de cuentas el que tiene la última palabra».
(LaIguana.TV)
