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A las tribulaciones de vivir hace ocho años bloqueados y las secuelas, de las que no se han recuperado, de la agresión militar israelí de julio y agosto pasados, los gazatíes suman ahora una emergencia por copiosas lluvias que han causado fuertes inundaciones, destacó Prensa Latina.

Partes de esta ciudad están cerradas mientras las aguas pluviales y albañales alcanzan medio metro de altura. Al respecto la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (UNRWA) alertó sobre las condiciones de las más de 100 mil personas dejadas sin hogar por la más reciente agresión de Tel Aviv.

“Las inundaciones exacerban las ya difíciles condiciones humanitarias ocasionadas por el bloqueo y la destrucción sin precedentes dejada por la más reciente ofensiva israelí”, refiere un comunicado de la UNRWA circulado por internet.

Socorristas voluntarios apoyados por personal de la UNRWA evacuaron a cientos de residentes en el distrito de Sheikh Radwan, donde la vida está paralizada.

Más de un centenar de escuelas en toda la franja se han visto obligadas a suspender las actividades docentes por una semana de tormentas que anuncian del crudo invierno levantino.

En octubre pasado una conferencia de donantes para Gaza convocada en El Cairo, capital egipcia, comprometió fondos por 5 mil 400 millones de dólares para la reconstrucción de este territorio, pero estos fondos aún no han comenzado a fluir.

 

(CIUDAD CCS)