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La hermana de Antoine Griezmann, Maud, tres años mayor que el jugador del Atlético de Madrid estudia en Nueva York y a su regreso, el próximo verano, se va a encargar de todos los asuntos relacionados con la imagen de Antoine. ‘Estamos muy unidos’, confesaba el francés a este periódico en una entrevista hace un par de meses.

 

Por eso este viernes, cuando Griezmann supo que había habido un ataque en la sala Bataclan, su piel mudó al blanco. Sabía que su hermana iba a un concierto allí y durante casi una hora tanto él, que ya había dejado el césped del Stade de France, como su padre, Alain, marcaban el teléfono de Maud sin éxito. Fueron 60 minutos eternos hasta que la chica devolvió la llamada. Una hora de angustia en la que en el entorno del Atlético de Madrid la noticia corrió como la pólvora.

 

En el ataque, donde fallecieron más de 80 personas según las últimas cifras oficiales, se vio envuelta la hermana del futbolista del Atlético. Griezmann puso primero un tuit donde rezaba «por mi hermana y por todas las víctimas» para después dar «gracias a Dios mi hermana logró salir del Bataclan. Todas mis oraciones son para las víctimas y sus familias. Viva Francia».

 

(elmundo.es)