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A la “Gaviota”, Angélica Rivera, le llueve sobre mojado. Y es que la famosa actriz de telenovelas vive su propio drama, convertida en la esposa del presidente de México, Enrique Peña Nieto. Definitivamente no sale de un escándalo para meterse en otro.

 

Ahora, y luego de rumorearse que estaba distanciada del político, incluso, viviendo en casas diferentes, un chaparrón de señalamientos la ponen el ojo del huracán, pues resulta que un reportaje de investigación, realizado por la periodista de CNN En español, Carmen Aristegui, señala que la boda Peña Nieto – Rivera se hizo sin que se anulara el primer enlace de la actriz, para impulsar la candidatura del mandatario.

 

Las irregularidades en el matrimonio religioso Peña-Rivera serían básicamente porque no se llegó a concretar la anulación eclesiástica del matrimonio anterior de Rivera con el productor de telenovelas José Alberto Castro. En la publicación se señala que la Arquidiócesis del cardenal Norberto Rivera fue cómplice de un “montaje” e “infamia” para anular este enlace religioso.

 

La investigación también detalla que la llamada “boda del año”, celebrada el 27 de noviembre del 2010, en la catedral de Toluca, en el estado de México, fue una farsa mediática, orientada a “empujar” el triunfo del entonces candidato presidencial, Enrique Peña Nieto, en su carrera hacia la más alta magistratura del país, aprovechando la indudable fama de Rivera, conocida por el grueso de la población asidua a telenovelas mexicanas.

 

El tema que pertenecía a la vida privada del ahora primer ciudadano de México se convirtió en un tema de investigación luego de que se conocieran las “injusticias” supuestamente orquestadas por el cardenal Norberto Rivera en contra del sacerdote José Luis Salinas Aranda quien, según cita el reportaje, desempeñaba actividades pastorales en una televisora.

 

La necesidad de agilizar la anulación del matrimonio religioso entre Rivera y Castro habría provocado que supuestamente al sacerdote Salinas Aranda le fueran anuladas las potestades de su ministerio sacerdotal, acusándolo de celebrar una boda falsa, con lo cuál se logró la anulación de la boda religiosa y Rivera quedó libre para contraer de nuevo matrimonio, esta vez, con Peña Nieto.

 

Agobiado por los ataques de los que fue objeto, Salinas Aranda, quien murió hace unos meses, hizo llegar una carta al papa Francisco, contándole acerca de lo sucedido.

 

Por su parte, el arzobispo de Chihuahua, Constancio Miranda, afirmó: “No tengo más qué decir que en el matrimonio que yo asistí la investigación estaba bien hecha, yo lo vi. Indicaba que había dos personas que se podían casar”. Y mientras tanto, en medio del escándalo, el Papa Francisco será recibido por Enrique Peña Nieto y su esposa mañana en el Palacio Nacional. Será el primer Pontífice que visitará este emblemático lugar.

 

Debido a la coyuntura, Angélica Rivera de Peña, presentó, el pasado lunes, el disco con el que dará la bienvenida al Papa Francisco: México se pinta de luz, en el que  participan artistas como Lucero, Cristian Castro, Pedro Fernández, Carlos Rivera, Belinda, entre otros. Un porcentaje de los compactos será destinado al Hospital Infantil Federico Gómez en la Ciudad de México, sitio que visitará el Papa durante su visita, acompañado de la popular “Gaviota” de la telenovela Destilando amor.

 

A pesar de que no se les veía juntos desde el pasado julio, el presidente mexicano y la actriz retoman el escenario público con su respectivo revuelo social que tanto los ha perseguido.

 

(Panorama)