-Si en la calle y en los cuarteles no se ha definido del todo la correlación de fuerzas y la concreción del proceso golpista, para los principales medios de comunicación corporativos, en especial los radicados en Sao Paulo, el golpe está en marcha.
-Más de una coincidencia comparte la actual situación en Brasil con lo ocurrido hace exactamente un año en Paraguay, toda vez que mañana se celebra exactamente un año del golpe parlamentario contra Fernando Lugo. En primer lugar, el cargo de embajadora de los EEUU en Brasil lo lleva Liliana Ayalde, la misma que el año pasado se encontraba en Paraguay cuando la masacre de Curuguaty desembocó en esa variable de golpe de Estado parlamentario que colocó en el poder al vicepresidente Federico Franco.
-Como en Paraguay, previo al desenlace abiertamente golpista, el estado de confusión y tensión psicológica prevaleció por varios días desde los medios de comunicación. Brasil no es Paraguay, pero los operadores e interesados en la violencia son los mismos personajes, así como las causas materiales en el fondo que condicionan tales protestas.
-Lo que comenzó como un movimiento reinvindicativo que se oponía al alza de los pasajes de transporte, objetivo alcanzado por las movilizaciones, del día de ayer (20 de junio) en adelante la situación ha venido transformándose en movilizaciones de los sectores de la derecha posmoderna: agrupaciones 2.0, movimientos «antipartido» y «antipolíticos», agrupaciones ultranacionalistas y militaristas, «ciudadanos comunes sin orientación política» y demás construcciones esencialmente mediáticas.
-Se puede entender el movimiento actual como una combinación del «indignado» español o turco -globalizados, con discurso vago- con los manitos blancas venezolanos -agrupaciones-fachada creadas y adiestradas por ONG vinculadas a la NED y la USAID. Los medios marcan la pauta y mantienen la convocatoria ciudadanista, como las «movilizaciones de la sociedad civil» que se desarrollaron en Argentina a finales de 2012, diseñados por la mediocracia local.
-Lo que originalmente era un movimiento con una orientación política concreta, activada mayoritariamente por estudiantes y formaciones de izquierda y que principalmente sustentaba su discurso desde una perspectiva izquierdista, ahora se compone por reclamos, denuncias y reivindicaciones vagas y abstractas. Comparten ambas movilizaciones la misma composición clasemediera, lo que facilita el proceso estético de migración ideológica: de una izquierda universitaria a una derecha posmoderna, mediática y también universitaria, sólo que bajo la generalización de «los jóvenes». A los que también acompañan padres y representantes.
Mientras centenas eran golpeados por usar prendas de color rojo o referencias a la izquierda, Globonews decía que la Avenida Paulista seguía «llena de manifestantes».
-En el caso de Sao Paulo, tal vez el más descriptivo de la nueva orientación fachofinanciera de la situación actual, difiere el grado de represión por parte de la policía del estado de Sao Paulo, bajo las órdenes del gobernador Geraldo Alckmin del Partido da Social Democracia Brasileira (PSDB), si en los inicios de las movilizaciones contra el alza del pasaje actuaron de forma violenta y represiva, con los manifestantes actuales mantiene una actitud apática y cómplice. Y si antes los medios celebraban la mano dura contra los manifestantes, ahora ocurre lo contrario.
-Si en un primer momento la plataforma de los medios corporativos criminalizaba y satanizaba las movilizaciones reivindicativas de los días anteriores, y fuertemente reprimidas en especial en Sao Paulo, en el momento actual, además de mantener el llamado a la calle permanentemente, el tratamiento que reciben los actuales grupos de choque en las calles de Sao Paulo es el de manifestantes, sociedad civl «harta» de la corrupción, del gobierno de Dilma, conviertiéndolos en luchadores por la libertad.
-Pero en la calle, desde el día de ayer, estas agrupaciones se dedican a agredir a cualquier persona vestida de rojo, el color -dentro de la lógica chata de los movimientos fascistas- que remite en primer lugar al Partido de los Trabajadores (PT) y en consecuencia a la izquierda en general. Los «responsables» de la crisis actual. Los medios simplifican el mensaje y lo conducen a la confrontación directa.
-El pasado 19 de junio, la Federação das Indústrias do Estado de São Paulo (FIESP), la poderosa cámara de industriales del Estado, recibió en su sede a la Escuela de Comando y Estado del Ejército, planteando «el rescate» de la industria militar, entre otros temas que a la luz de los acontecimiento ofrece una lectura distinta. Los llamados a las Fuerzas Armadas para pronunciarse por la opción golpista también comienzan a multiplicarse por las redes sociales.
-Por el otro lado, los sectores tradicionalmente revolucionarios y, por encima de ellos, las barriadas no se han movilizado con la misma contundencia en respuesta a los más recientes acontecimientos, al menos en Sao Paulo. ¿Cómo se expresará la hora del pueblo?
