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El Embajador de Venezuela ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Bernardo Álvarez, ratificó ayer que los asuntos de Venezuela “son temas internos que resolvemos los venezolanos de acuerdo a lo que dice la Constitución, como lo hemos venido haciendo, y no creemos que deban ser llevados al Consejo Permanente (CP) más aún por la solicitud de un agente que no es el que representa al Estado en la OEA”.

 

En conversación desde Washington con Últimas Noticias, aclaró que “la OEA es una organización de Estados soberanos, y a ellos corresponde hacer planteamientos ante el CP de situaciones particulares en sus países, a menos que haya una situación muy particular donde haya un país sin un Gobierno y entonces el Secretario General (Luis Almagro) o cualquier Estado puede plantear o discutir el caso de ese país, porque es una alteración clarísima del orden constitucional, legal y político de ese país. Venezuela no entra en ninguno de esos supuestos que están en la Carta de la OEA ni en la Carta Democrática”.

 

El diplomático recordó que en Venezuela “hay una institucionalidad que actúa para dirimir las diferencias entre los actores políticos. No se le puede dar un golpe a esa institucionalidad, cómo va a venir un CP sin la autorización de Venezuela, a meterse en los temas de Venezuela o a discutir el tema venezolano pasando por encima de lo que las instituciones venezolanas dicen”.

 

Sobre la posición asumida por el secretario general, Luis Almagro, cuestionó que “tomó partido. No tiene ninguna neutralidad, es un agente político, absolutamente sesgado hacia el caso venezolano. No tiene ninguna credibilidad ni legitimidad para tratar el caso venezolano”.

 

Aclaró el Embajador que Almagro sí puede llevar un planteamiento al CP, pero si es de la situación venezolana “tiene que contar con el aval del Estado o porque Venezuela lo solicite o porque Venezuela esté de acuerdo con el Secretario General en ese tema, y ninguno de esos dos supuestos está planteado”.

 

Asimismo, explicó que el artículo 110 de la Carta de la OEA dice que se puede acudir cuando haya situaciones que afecten gravemente la paz y seguridad del continente, “imagínate un país como Venezuela que en este momento está ayudando de la manera más decidida a la paz en Colombia, al contrario, el Gobierno de Venezuela en su actuación internacional está ayudando a la paz y a la estabilidad del hemisferio, y no atentando contra la paz. De allí que no hay forma de invocar esa Carta”.

 

(ÚN)

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