La cara de Luis Suárez durante todo el partido lo decía todo: moría de ganas por entrar a la cancha y ayudar a su equipo. Sin embargo, el director técnico uruguayo, Oscar Tabárez, dispuso lo contrario.
A la estrella del Barcelona no le quedó más que desahogarse estrellando su puño contra el plástico protector del banco de suplentes. El gesto y el reclamo no debería sorprender a nadie, el delantero es de los que siempre quiere jugar.
La furia e impotencia de Suárez fue capturada una y otra vez por las cámaras en la noche de este jueves. Noche en la que la selección de Uruguay no solo cayó derrotada por la de Venezuela por 1-0, sino que además fue superada en todos los aspectos del juego.
#CopaAméricaEnTyC La increíble reacción de Suárez porque no entró en el segundo tiempo https://t.co/EN0y6yd5SJ
— TyC Sports Play (@TyCSportsPlay) 10 de junio de 2016