Una explosión, que se ha cobrado la vida de al menos una persona y ha dejado a doce heridos frente al restaurante Eugene Weinstube en el centro de la ciudad alemana de Ansbach, fue causada por un artefacto. Así ha declarado la alcaldesa de la ciudad citada por Reuters. Tres de los heridos se encuentran en estado grave.

 

Los agentes han acordonado el centro de la ciudad, al sitio de la explosión han acudido los servicios de emergencia. Un helicóptero con focos de búsqueda está sobrevolando la ciudad.

 

¿Quién es el atacante?

 

Según las autoridades, citadas por AFP, el atacante es la persona muerta en la explosión. El autor del ataque ha sido identificado como un sirio de 27 años al que se le había denegado asilo en Alemania hace un año, según el ministro del Interior del país, Joachim Herrmann. La Policía conocía al suicida, que había intentado suicidarse dos veces.

 

Poco antes de la explosión le fue prohibida la entrada a un festival de música celebrado cerca del restaurante. La Policía no descarta que el suicida fuera un extremista.

 

«No se puede descartar un atentado terrorista»

 

El Ministerio del Interior de Baviera no descarta que se trate de un atentado terrorista y actualmente se está investigando si detrás de la explosión están los yihadistas. «La investigación mostrará si es posible calificar el incidente de ataque terrorista yihadista», ha señalado el ministro del Interior de Baviera, Joachim Herrmann, añadiendo que «no se puede descartar» este extremo. Ha destacado también que se desconoce si el objetivo del autor de la explosión era suicidarse.

 

El artefacto contenía elementos metálicos de alcance destructivo. Los investigadores han encontrado un móvil que supuestamente pertenecería al autor del ataque. Los especialistas están analizando los datos del dispositivo.

 

La versión inicial

 

La investigación inicial apuntaba que la explosión había sido causada por una fuga de gas. Sin embargo, la alcaldesa de Ansbach, Carda Seidel, ha informado que fue el resultado de la detonación de un artefacto explosivo improvisado. «La explosión en la ciudad de Ansbach no fue de gas, sino que fue causada por un artefacto», ha declarado Seidel.

 

El día del ataque

 

En la ciudad, cerca del restaurante donde se produjo la explosión, se celebraba el festival de música al aire libre Ansbach Open, que fue suspendido tras la explosión. Cerca de 2.500 visitantes han sido evacuados desde el sitio, informa el periódico alemán ‘Nordbayern’. El festival dura tres días y debía terminar este 24 de julio.

 

Ansbach se encuentra en Baviera, a 40 kilómetros de Núremberg y a 150 kilómetros de Múnich. En Ansbach se encuentra una base militar estadounidense y la Brigada de Aviación de Combate número 12 de EE.UU. Un portavoz de la base ha declarado no tener información sobre la explosión.

 

Una semana de eventos trágicos en Alemania

 

Actualmente el país se encuentra en estado de alerta tras la serie de eventos trágicos que sucedieron en una sola semana.

 

El lunes 18 de julio un joven de 17 años de origen afgano que había llegado al país como refugiado atacó a los pasajeros de un tren con un hacha y un cuchillo. El ataque, perpetrado en la línea de ferrocarril que une las ciudades bávaras de Wurzburgo y Ochsenburg, dejó al menos cinco heridos. El criminal fue abatido por la Policía cuando intentaba escapar.

 

El viernes 22 de julio en el mismo estado de Baviera, esta vez en la capital, Múnich, nueve personas murieron y al menos 20 resultaron heridas en el centro comercial Olympia cuando Ali David Sonboly, un alemán de origen iraní de 18 años, disparó contra la multitud. El autor se suicidó tras el ataque. No se ha confirmado que se trate de un ataque extremista.

 

El domingo 24 de julio un hombre armado con un machete mató a una vendedora de kebabs tras pelearse con ella, e hirió a otras dos personas en la ciudad de Reutlingen, en Baden-Wurtemberg. La Policía detuvo al atacante, un sirio de 21 años que actuaba solo.

 

(RT)

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