trump-c.jpg

En la campaña electoral de Estados Unidos, hace tiempo que de lo único que se habla es del comportamiento sexual de Donald Trump.

 

En concreto, de si ha manoseado o besado sin consentimiento a alguna mujer, como varias han salido a denunciar y como, por otra parte, se le oye presumir en un video de 2005.

 

Desde que en el segundo debate con Hillary Clinton, Trump asegurara que no lo hacía, que eran solo palabras, no han parado de surgir mujeres a desmentirlo. Ya van al menos 11.

 

Y mientras el magnate convertido en candidato asegura que son todo mentiras, este viernes, se sumaron al menos dos: una exparticipante del concurso televisivo The Apprentice y una exempleada de un local nocturno de Manhattan.

 

Summer Zervos, quien concursó en The Apprentice, el reality show televisivo del que Trump fue presentador, dijo que el magnate se propasó con ella en un encuentro que tuvieron en un hotel en Los Ángeles, adonde la había invitado para hablar sobre oportunidades de trabajo.

 

Por su parte, Kristin Anderson le dijo a The Washington Post que Trump la manoseó en un local de Nueva York, en el que ella trabajaba como anfitriona mientras esperaba convertirse en modelo.

 

En el video de 2005, se oye a Trump jactarse de que como era «una estrella», podía manosear y besar a las mujeres que quería.

 

La grabación provocó un escándalo y le costó numerosas críticas, incluso en el seno del Partido Republicano.

 

En el debate del domingo, Trump calificó lo que se le oye decir en el video de «conversación de vestuario» y negó haberlo hecho jamás.

 

Pero eso no es lo que aseguran varias mujeres, a las que el candidato tacha de mentirosas.

 

Un famoso desconocido

 

Anderson, quien ahora tiene 46 años, dijo que un día mientras estaba trabajando en un local nocturno de Nueva York en el que su labor es acompañar a los clientes a las mesas, un hombre metió su mano por debajo de su minifalda y tocó su vagina a través de su ropa interior lo que la dejó «asqueada y asustada».

 

Entonces, cuando se dio vuelta para ver quién había sido, encontró a un hombre sentado en un sillón rojo al que inmediatamente reconoció como el magnate inmobiliario.

 

«Era inconfundible, con el cabello y sus cejas. Nadie más tiene esas cejas», dijo Anderson al diario estadounidense The Washington Post.

 

«No era un acto de seducción sexual. No sé por qué lo hizo. Era solo como para probar que él podía hacerlo y no iba a pasar nada. No hubo ninguna conversación. Ni siquiera realmente nos miramos. Fue algo muy casual, muy desenfadado de su parte», comentó Anderson sobre el suceso ocurrido en la década de 1990.

 

The Washington Post dijo que se acercó a Anderson tras escuchar sobre su experiencia a través de una tercera persona y que ella esperó varios días decidiendo si quería hacer público su caso.

 

«Trump niega de forma categórica estas acusaciones falsas hechas por alguien que está buscando conseguir un poco de publicidad gratuita. Esto es totalmente ridículo», dijo la portavoz del candidato republicano, Hope Hicks, en un email enviado al diario.

 

Entrevista de trabajo

 

El otro caso denunciado este viernes es el de Summer Zervos, quien participó en 2006 en la quinta temporada de The Apprentice.

 

Según su relato, al año siguiente se encontró con Trump en un bungaló de un hotel de Los Ángeles, al que fue invitada para discutir sobre oportunidades laborales.

 

Zervos dijo ante la prensa que el magnate la saludó con un beso en la boca y que le pidió que se sentara a su lado en un sofá.

 

«Agarró mi hombro y comenzó a besarme de nuevo de forma muy agresiva y puso sus manos en mis pechos», aseguró la mujer.

 

Agregó que luego Trump quiso llevarla al dormitorio y comenzó a «empujar sus genitales» contra ella, pese a que ella intentaba detener sus avances.

 

Zervos presentó su caso con la ayuda de la abogada Gloria Allred, una reconocida activista de derechos civiles que representó a las mujeres que acusaron de abusos sexuales al comediante Bill Cosby.

 

Dudas sobre las acusaciones

 

El candidato republicano a vicepresidente, Mike Pence, dijo que este viernes surgiría nueva evidencia que va a permitir cuestionar las acusaciones de abusos sexuales contra Trump.

 

Acusó a la «maquinaria política de Clinton» de usar mentiras y calumnias para desviar la atención de los temas verdaderos.

 

En los últimos días, la campaña de Trump ha sido sacudido por acusaciones de varias mujeres que afirman que Trump intentó propasarse sexualmente con ellas, algo que él ha negado de forma insistente.

 

(BBC)