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Nuevamente las encuestadoras más “fiables” se pelaron al asegurar el triunfo presidencial de Hillary Clinton sobre Trump. Al parecer, el candidato republicano tenía mucha razón al señalar a finales de octubre que las encuestas se equivocaban, acusando a los medios de comunicación de formar parte de un plan para “amañar” las elecciones.

 

“(Los medios) están enseñando encuestas falseadas que tienen un gran peso de los demócratas (…) como la encuesta de ABC que acaba de salir. Totalmente falseada. Pero en las encuestas que han sido rigurosas durante años vamos ganando”, opinó Trump en Boyton Beach, Florida.   

 

En la encuesta de ABC News que se publicó el domingo 23 de octubre, Clinton recibía una ventaja de 12 puntos, con un 50% frente al 38% del magnate. Según la encuesta, el margen de la exsecretaria de Estado del país norteamericano aumentaba hasta 20 puntos entre las mujeres y se situaba dentro del margen de error entre hombres y votantes de raza blanca.

 

Sin embargo, Trump sí compartió las pocas encuestas que lo ponían por delante de Hillary, como la realizada por Rassmusen Reports, que informaba que el multimillonario contaba con el 43% de la intención de voto, frente al 41% de Clinton, dentro del margen de error de 2,5% y en la práctica un empate técnico.

 

No obstante, la media de las encuestas realizadas por el portal Real Clear Politics dio a Clinton una ventaja de 6 puntos sobre Trump, afirmando que no llegaba al 40% de la intención de voto.

 

Por otro lado, un aliado del multimillonario ya había adelantado que las empresas encuestadoras hacían mal su trabajo, y él tenía experiencia personal para probarlo.

 

Se trata de Nigel Farage, un político de derecha en el Reino Unido, quien abogó por abandonar la Unión Europea (UE) en el referendo que se realizó en junio, en el que para sorpresa de muchos, ganó el “Leave”, es decir, el voto de Reino Unido a favor de dejar la UE, (Brexit). 

 

«Las encuestadoras modernas no pueden llegar a los no votantes que están volviendo a entrar al sistema. La pregunta es, ¿está alcanzando Trump a los no votantes? Me han dicho que el nuevo registro de votantes es bastante alto. Podría ser que Hillary esté de delante, pero tal vez no tanto», había declarado Farage a una cadena de noticias estadounidense.

 

Sea por un pequeño o sustancial “margen de error”, lo cierto es que la profesionalidad de los sondeos electorales parece atravesar en la actualidad una crisis por su clara incapacidad de anticipar procesos tan importantes como el Brexit y las elecciones presidenciales en los Estados Unidos.

 

(LaIguana.TV)