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Un primero de febrero de 1817 nació Ezequiel Zamora, hace exactamente 193 años, en la población de Cúa, estado Miranda. Fue, en primer lugar campesino, y se convirtió luego en militar, dirigente popular y en el primer caudillo social y revolucionarios del siglo XIX, siendo el gran heredero del legado idealista del Libertador Simón Bolívar.

 

El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez Frías, lo considera uno de los pensadores y actores socialistas de mayor raigambre popular y que hoy sirve de nutriente y de sustento al proyecto socialista bolivariano, zamorano, inspirado en este gran líder, campesino, y luchador por la libertad.

 

“En Zamora no sólo se acendraba la lucha de clases de modo instintivo, como podría interpretarse, por ejemplo, en la rebelión popular de 1814, sino que a la conciencia de clase la acompañaba la conciencia de nacionalidad, la consolidación de la Patria como territorio y, sobre todas las cosas, la herencia de la Patria bolivariana: patria popular y justa, vejada y traicionada por los antiguos aliados del Libertador”, expresó el Jefe de Estado en Las Líneas de Chávez del 10 de enero de 2010.

 

Zamora fue un líder de destacada participación en la Guerra Federal o Guerra Larga (1859-1863) como defensor de la idea de la Federación, se caracterizó por hacer suyas cualidades de los personajes liberales de su tiempo.

 

Su niñez la pasó en una población convulsionada por las luchas independentistas. Una vez que se traslado hasta Caracas para cursar estudios en la escuela de Lancaster, su única educación formal, se percató de la situación política en Europa y fijo en ella su atención.

 

Parte de su formación académica se basó en el mundo de la Filosofía Moderna y los fundamentos de Derecho Romano, donde descubrió y profundizó en los principios de la igualdad y la necesidad de su ejecución en el país.

 

Se unió al Partido Liberal y luego se presentó a las elecciones de 1846 como candidato a elector por el cantón de Villa de Cura, pero su nominación fue objetada por los conservadores, situación que lo motivó a declarar su guerra en favor de los pobres.

 

Fue entonces el 7 de septiembre de 1846 cuando el General del Pueblo Soberano se levantó en armas en la localidad de Guambra, con las consignas “tierra y hombres libres”, “respeto al campesino” y “desaparición de los godos”.

 

Tras varias batallas en las cuales resultó tiunfador, fue derrotado y capturado el 26 de marzo de 1847 y condenado a muerte el 27 de julio de ese mismo año, pero José Tadeo Monagas le condonó la pena.

 

Guerra Federal

 

En 1859 se desató la Guerra Federal, encabezada por Juan Crisóstomo Falcón, a quien Zamora se unió como jefe de operaciones de occidente. Siendo el brazo ejecutor de la Guerra Federal desarrolló una gran actividad y, gracias a su carisma, logró organizar un ejército popular a favor de los federales.

 

El 28 de marzo de 1859 tomó San Felipe y ordenó la provincia de Yaracuy como entidad federal. El 10 de diciembre de ese año se desarrolló la batalla de Santa Inés, en la que participó como principal líder y estratega.

 

En el combate derrotó al ejército centralista; acción fundamental en el proceso de la Guerra Federal y testigo de las cualidades extraordinarias de Zamora como conductor de tropas.

 

Después, Zamora se fue al centro del país penetrando Barinas y Portuguesa, pero antes de llegar a Caracas decidió atacar a la ciudad de San Carlos. Durante los preparativos para la toma de la plaza, recibió un disparo en la cabeza que le ocasionó la muerte. Tenía 42 años de edad.

 

Su repentina desaparición cambió el rumbo exitoso que llevaba la guerra para los federales y ha sido considerada para muchos como la pérdida del más importante líder popular venezolano del siglo XIX.

 

“No habrá pobres ni ricos, no habrá esclavos ni amos, no habrá poderosos ni desdeñados; a partir de ahora, todos seremos hermanos y nos trataremos de igual a igual, como hermanos”, fue la proclama más emblemática que, poco antes de expirar, dejó por escrito el general Zamora.

 

Hoy es considerado por la Revolución Bolivariana como un antecedente histórico e ideológico de referencia. Por ello, el presidente Chávez lo mantiene presente en su memoria:

 

“Zamora vive y tiene mucho por hacer en esta hora de la historia. Su causa la encarna hoy la Venezuela campesina, la Venezuela rural, la Venezuela pueblo, la Venezuela soldado, heredera de los vencedores y vencedoras de Santa Inés”, son palabras del Presidente.

 

(Agencia Bolivariana de Noticias)