cuadro-corrup.jpg

 

Según un artículo de The Associated Press, fiscales federales de Estados Unidos investigan a altos funcionarios venezolanos, incluyendo miembros del Ejército, para determinar su responsabilidad en el supuesto lavado de dinero a través del sistema financiero estadounidense procedente de “irregularidades” en contratos de alimentos, sin que hasta los momentos de hayan presentado cargos.

 

Según la “investigación” de esta agencia, publicada el mes pasado, hay una cadena de negocios sucios en el Ejército venezolano, destacando el pago de comisiones a generales por contratos de alimentos y sobornos para retirar los productos que llegan al puerto.

 

“Cuando el ejército lucra con la distribución de comida mientras el pueblo venezolano sufre cada vez más hambre, la corrupción ha alcanzado nuevos niveles de perversión que no pueden quedar inadvertidos”, señaló el senador demócrata Ben Cardin, de Maryland, miembro de alto rango de la Comisión de Relaciones Exteriores.

 

Por su parte, el senador republicano por Florida, Marco Rubio, expresó que el nuevo presidente Trump debe adoptar medida para sancionar a los supuestos funcionarios corruptos mencionados por la agencia: “Esta debería ser una de las primeras acciones del presidente Trump”, declaró.

 

El diputado a la Asamblea Nacional (AN) por la Mesa de la Unidad Democrática, Carlos Berrizbeitia, quien forma parte de la Comisión de Contraloría de la AN, declaró que era bienvenida “la ayuda de cualquier otro país” para investigar este caso, pues era necesaria la “presión” para el funcionamiento de las instituciones venezolanas.

 

Asimismo, la “investigación” cita a un venezolano, Manuel Blanco, quien desde una fila de horas para comprar arroz expresó que “el pueblo intenta vivir alimentándose de sopa y banana triturada”.

 

(LaIguana.TV)