La delegación de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), presentó una serie de propuestas que permita alcanzar acuerdos de paz con el Gobierno colombiano.
Mediante un comunicado difundido este sábado, la guerrilla colombiana llamó a concretar un cese bilateral de fuegos y hostilidades, suspender proyectos de inversión minero-energética y de infraestructura en curso o previstos que estén generando desplazamiento, despojo u otras vulneraciones sobre los derechos humanos.
También, detener el trámite y archivar iniciativas legislativas que por sus contenidos vayan en contraposición a los acuerdos parciales alcanzados en la Mesa de diálogo, precisa una nota de Prensa Latina.
En el escrito se pide la superación de las condiciones estructurales de la violencia del sistema y de los procesos de victimización que de ella se derivan.
A la vez, se precisa poner en marcha un proceso constituyente abierto, con la más amplia participación, que deberá conducir a la convocatoria y realización de una Asamblea Nacional Constituyente.
Las FARC-EP exige la proscripción de medidas contrainsurgentes y de la seguridad nacional, promoviendo una nueva cultura política que garantice la regulación democrática del conflicto social y la protección de los derechos humanos poniendo freno a la intervención foránea.
Insta a la desmilitarización de la sociedad y reforma del Ejército y de Policía, incluido los servicios de inteligencia del Estado, esto implica: la reconversión de las fuerzas contrainsurgentes a de protección de la soberanía nacional y de las fronteras.
Asimismo, el desmonte y erradicación del paramilitarismo, para lo cual se conformará una comisión de esclarecimiento del paramilitarismo.
La guerrilla pidió garantías para el ejercicio de la política, del derecho a la movilización y a la protesta social, al tiempo que debe crearse la conformación de la comisión constitucional permanente de garantía, protección y promoción de los derechos humanos y de prevención de sus graves violaciones.
También, debe proveerse las condiciones necesarias de seguridad personal y colectiva a dirigentes políticos y sociales, obreros, campesinos, indígenas y afrodescendientes, a defensores de derechos humanos, a sus múltiples instituciones y procesos organizativos, señala el texto.
Las FARC-EP hizo un llamado a la construcción y protección de la memoria y de la verdad histórica, y se comprometió a la finalización de la confrontación armada y transformarse en movimiento político.
(AVN)
