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No es nuevo que entre opositores se pisen la cola y que entre ellos mismos se lancen puñaladas traperas, sin embargo nunca deja de sorprender cuando los responsables quedan expuestos.

 

Quién diría que Ronald González de Primero Justicia (PJ) y Alejandro Feo la Cruz, Alcalde de Naguanagua y Coordinador de Voluntad Popular (VP), les estaban tendiendo una trampa al mismísimo Enzo Scarano.

 

Y es que se pudo conocer que el exalcalde guarimbero del municipio San Diego, en el estado Carabobo, Enzo Scarano, fue sentenciado por parte de la Contraloría General de la República el día 3 de marzo, inhabilitándolo políticamente por un período de 15 años pero lo que no se había revelado es que sus compañeritos de la oposición fueron quienes lo vendieron.

 

Scarano no logró divisar que era víctima de una verdadera conspiración que se logró esconder en un pacto secreto, en un callado trato entre  factores de vocación opositora.

 

Y es que la más hábil de las artimañas iba de manos del alcalde Alejandro Feo La Cruz, quien a pesar de contar con un importante respaldo del sector opositor en todos los estudios de opinión en audiencias privadas con el presidente del Parlamento Henry Ramos Allup, hizo énfasis en la imperiosa necesidad de formalizar la inhabilitación de Enzo Scarano, quien obviamente no contaba con aliados en el G4, por lo que el alcalde de Naguanagua nunca decayó en sus esfuerzos y se encargó personalmente de investigar en la sede de la Contraloría General para conocer el estatus de la causa.

 

Lo más escabroso de todo este asunto, es que luego de consumada la confabulación y hecha pública la decisión de inhabilitar al exalcalde y líder de las guarimbas del 2014 en Carabobo Enzo Scarano, todo estalló en celebración y brindis, para que los adecos alzaran sus copas por el G4 y los naranjas en estado de insuperable euforia observaban cómo su jefe regional, era masacrado políticamente y hecho a un lado para postularse a las elecciones regionales en el estado Carabobo.

 

La única verdad del asunto es que caras vemos, corazones no sabemos, en el mundo político así como en la vida misma estamos expuestos a recibir traiciones y puñaladas por parte de quienes solían ser nuestros mejores aliados, así que estos opositores deberían aprender a no confiar en nadie, pero mucho menos en quienes dicen ser sus compañeros de ideales y tolda.

 

(Lechuguinos)