Luego de la reciente decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de suplir las competencias de la Asamblea Nacional por la condición de desacato del Poder Legislativo, los líderes de la oposición venezolana ahora se han dedicado a negar la ilegalidad del parlamento, pese a que la reconocieron durante las mesas de diálogo establecidas con el Gobierno.
Recordemos que a finales del año pasado, el Ejecutivo Nacional y dirigentes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) asumieron el compromiso de poner en práctica una hoja de ruta para garantizar la estabilidad y la paz del país.
Dentro de estos acuerdos, suscritos por ambas fuerzas políticas se acordó “avanzar en la superación de la situación de desacato de la Asamblea Nacional dictada por el Tribunal Supremo de Justicia” e “instar a los poderes públicos competentes a actuar en la resolución de la situación del caso Amazonas en términos perentorios”.
Partiendo de esta medida, acordada el 12 de noviembre de 2016, resulta evidente que los recientes ataques que realiza la derecha venezolana en contra del máximo órgano judicial de la nación reflejan su falta de compromiso, así como una total contradicción en sus acciones, producto del desespero por alcanzar el poder a costa de cualquier mecanismo.
(LaIguana.TV)
