El director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), Mike Pompeo, es un hombre de 53 años que forma parte del área ultra conservadora que acompaña al presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Es un militar, político y abogado, experto en asuntos de inteligencia, de seguridad nacional y militares. Se ha caracterizado, entre otros aspectos, por avalar los casos de tortura durante los interrogatorios a prisioneros de guerra.
«Estos hombres y mujeres no son torturadores, son patriotas», dijo en el año 2014. Es partidario de que se mantenga abierta la cárcel de Guantánamo, en Cuba, y defiende el programa de recolección masiva de datos personales por parte de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA). Como legislador criticó fuertemente el acuerdo nuclear establecido entre la administración de Barack Obama con Irán, publicó en un reportaje sobre el personaje BBC Mundo.
Pompeo es acusado de “islamofóbia”, por sus comentarios contra los líderes religiosos del islam.
«Cuando los ataques terroristas más devastadores en Estados Unidos en los últimos 20 años vienen en su mayoría de personas de una sola fe, y se llevan a cabo en el nombre de esa fe, una responsabilidad especial recae sobre aquellos que son los líderes de esa fe (…) En vez de responder, el silencio ha hecho a estos líderes islámicos a través de EEUU cómplices potenciales de estos actos», dijo.
Posee entre sus empresas una firma que fabrica piezas de aviación y una compañía de suministro para yacimientos petrolíferos.
Esta es una parte de la historia de este oscuro personaje que, en recientes declaraciones, ha dicho que la organización que dirige se mantiene en constante conversaciones con México y Colombia para afinar estrategias que conlleven al derrocamiento del presidente Nicolás Maduro.
(LaIguana.TV)
