Este jueves, durante horas de la mañana, estudiantes de la Universidad Central de Venezuela (UCV), del núcleo ubicado en el estado Aragua, salieron a manifestar en la calle por segundo día consecutivo, para exigir sea reabierto el comedor de dicha casa de estudio, el cual lleva más de 5 meses sin funcionar.
Los manifestantes, trancaron las vías de acceso al recinto estudiantil, con pancartas que exigían a la Oficina de Planificación del Sector Universitario (OPSU), les bajase los recursos para reabrir el servicio de comedor.
La cuestión seria preguntarle a esos estudiantes, si ellos están al tanto de que a la UCV le ha sido asignada la partida presupuestaria por parte del gobierno nacional, para la remodelación de los comedores de esa sede y la de Caracas, sin embargo hasta la fecha la rectora de esa casa de estudios, Cecilia García Arocha, se niega a rendir cuentas y a explicar en que ha gastado el dinero.
Recordemos que situaciones similares se han vivido en Caracas, cuando el comedor fue reacondicionado y para el momento de su reapertura, hubo que suspender porque faltaba una pieza para la cocina, dicho por el propio administrador del espacio, Hugo Armando Guerrero, en declaraciones ofrecidas el pasado mes de octubre al diario Correo del Orinoco.
En consecuencia, lo que no se entiende es por qué pretende achacarle la culpa al gobierno, cuando las máximas autoridades de la UCV, se encuentran en el ojo del huracán en los actuales momentos, por las gravísimas denuncias de malversación de fondos que sobre ellos pesa.
La protesta es legítima y se respeta, lo que no se puede es manipular la realidad, cuando a todas luces es responsabilidad de Cecilia García Arocha y su combo, de que hoy en día los estudiantes del núcleo Aragua no tengan servicio de comedor.
(LaIguana.TV)
