La visita a Perú del secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, y las consecuentes maniobras del llamado Grupo de Lima contra el gobierno de Venezuela, han servido para que el presidente peruano, Pedro Pablo Kuczynski, intente tomar un poco de aire y salvar su propio pellejo, opinan medios alternativos del país inca.
Julio Blanco, dirigente de Resistencia Sur Perú, en un reportaje publicado en el portal La Izquierda Diario, bajo el sugerente título “Secretario de Estado de Trump le da un like a Kuczynski”, indica que el paso de Tillerson por Lima “se da en el marco de los preparativos de la Cumbre de las Américas y de la consolidación de las políticas injerencistas del imperialismo norteamericano en esta parte del mundo, la cual, entre otras cosas, busca terminar de asfixiar al gobierno de Venezuela”.
La nota señala que Tillerson visitó Perú “en momentos en que el gobierno de Kuczynski atraviesa una de sus más severas crisis, la cual ha sido acicateada por las denuncias de corrupción que comprometen al mandatario cuando este se desempeñaba como ministro del expresidente Alejandro Toledo y por haber indultado a Alberto Fujimori”.
Según el analista, “estos elementos han llevado a que se den masivas movilizaciones en casi todo el país y que se vuelva a poner en agenda del congreso de la República, la posibilidad de aprobar la vacancia (cese) del presidente peruano”.
El próximo 28 de febrero, el caso Odebrecht, por el que se procesa a Kuczynski, tendrá un capítulo importante, cuando declare uno de los protagonistas del escándalo, el brasileño Jorge Barata. Se estima que el testimonio de Barata podría hundir a Kuczynski.
El reportaje indica que Kuczynski ha procurado aprovechar la visita de Tillerson para oxigenarse ante sus adversarios políticos, al aparecer como un presidente apoyado por EEUU. “Para eso no ha dudado en aceptar con los brazos abiertos la cooperación militar ofrecida por el gobierno norteamericano, a cambio de convertirse en uno de los sostenes regionales de la política pro golpista que viene ensayando los EEUU en Venezuela”, precisa el material periodístico.
Según el trabajo de La Izquierda Diario, “el apoyo y sometimiento del actual gobierno peruano al gobierno de los EEUU, no es nuevo, sino más bien se da desde cuando Kuczynski asumió su mandato. A ello se debe la constitución del denominado Grupo de Lima compuesto por 12 países de la región formando un rejunte de gobiernos conservadores – algunos de ellos golpistas como el de Temer en Brasil, y que ha tenido por objetivo ser la correa de trasmisión de la política yanqui en el continente, por eso han centrado su actuación en debilitar al gobierno venezolano”.
Añade que el rol jugado por PPK en esta tarea, fue reconocido públicamente por Tillerson durante su visita, cuando expresó que «Estados Unidos agradece profundamente el liderazgo del Perú en la región, sobre todo en el trabajo del Grupo de Lima, para abordar la destrucción terrible que existe en este momento en la democracia venezolana. Nosotros intercambiamos ideas sobre qué es lo que podemos hacer para lograr que Venezuela vuelva a su ruta».
El Grupo de Lima, siguiendo esas expresas instrucciones, se reunió una semana después y decidió retirar la invitación al presidente Maduro a la VIII Cumbre de las Américas, a celebrarse en la capital peruana en abril.
(LaIguana.TV)
