El presidente de México, Enrique Peña Nieto, se comprometió este viernes a castigar a todos los responsables de la desaparición de 43 estudiantes, minutos después de hacerse público que sicarios del narcotráfico declararon que los jóvenes están muertos.

 

«A los padres de los jóvenes desaparecidos y la sociedad en su conjunto, les aseguro que no cejaremos hasta que se haga justicia», dijo en un evento público Peña Nieto sobre el crimen que ha generado la mayor crisis de su mandato.

Presuntos sicarios del narcotráfico detenidos en México han declarado que más de 40 estudiantes desaparecidos están muertos y sus cadáveres fueron incinerados, informó este viernes la fiscalía general sobre un caso que ha conmocionado al país y a la comunidad internacional.

 

Un total de 43 estudiantes de una escuela de Ayotzinapa (Guerrero, sur) están desaparecidos desde que fueron atacados por policías de la cercana ciudad de Iguala la noche del 26 de septiembre y entregados después a sicarios del grupo narcotraficante Guerreros Unidos.

 

De acuerdo con los nuevos testimonios de detenidos, más de 40 jóvenes fueron trasladados esa noche en vehículos a un basurero de la vecina localidad de Cocula a donde algunos ya llegaron muertos asfixia.

 

«Los otros fueron interrogados por el grupo criminal para determinar quiénes eran y los motivos de su llegada a Iguala», señaló el fiscal general, Jesús Murillo Karam, en una conferencia de prensa.

 

Los estudiantes se habían desplazado a Iguala para recaudar fondos para su escuela. Para regresar a sus casas se habían apoderado de dos autobuses en Iguala, una ciudad donde sus autoridades son acusadas de servir a los Guerreros Unidos en sus pugnas territoriales con otros carteles.

 

Los detenidos señalan que «privaron de la vida a los sobrevivientes y después los arrojaron a la parte baja del basurero y quemaron los cuerpos durante horas con gasolina, llantas, leña y otros elementos”, dijo Murillo Karam, quien apoyó su conferencia de prensa con grabaciones de las confesiones y de la reconstrucción del crimen.

 

En ese basurero los peritos encontraron cenizas y algunos restos óseos humanos. Según los detenidos, los otros restos calcinados fueron fracturados y colocados en bolsas de basura que vaciaron en un río cercano.

(Panorama)