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A última hora de la tarde de este sábado, los seis oficiales del Departamento de Policía de Baltimore, contra los que había presentado cargos la fiscalía horas antes por la muerte de Freddie Gray, han quedado en libertad bajo fianza.

 

La fiscal del Estado para Baltimore, Marily Mosby, dio cuenta de los cargos que se les imputa por la negligencias cometidas durante el arresto el pasado 12 de abril del joven afroamericano de 25 años, que murió una semana más tarde por las heridas provocadas en el furgón policial durante su traslado.

 

El delito más grave le ha sido imputado a Caesar Goodson, 45 años, que conducía el furgón policial. Ha sido acusado por la Fiscalía de asesinato en segundo grado con alevosía -que puede ser castigado hasta con 30 años de prisión. Según la versión de los hechos dada a conocer por la fiscal Goodson acudió en varias ocasiones a comprobar el estado de Gray. Sin embargo, ignoró su petición de asistencia médica y acudió a recoger a otro detenido antes de dirigirse a comisaria. También ha sido imputado por homicidio, asalto y mala conducta. Trabaja en el departamento desde 1999.

 

El oficial William Porter, 25 años, que acudió a la llamada de Goodson pidiendo ayuda para vigilar a Gray, ha sido acusado de homicidio -involuntario-, asalto en segundo grado y negligencia. Se unió a la policía de Baltimore en 2012.

 

De los tres policías que patrullaban el área en bicicleta cuando persiguieron al joven, el teniente Brian Rice, 41 años, que hizo contacto visual con el joven y éste hecho a correr, ha sido acusado de homicidio involuntario -que puede ser penado con 10 años de cárcel si es encontrado culpable-, asalto en segundo grado, negligencia y detención ilegal. Es el más veterano de los oficiales involucrados en la muerte del joven que trabaja en del departamento desde 1997.

 

Los cargos que se han presentado contra los otros dos agentes que alcanzaron a Gray, Edward Nero, 29 años, y Garret Miller, 26 años, son asalto en segundo grado, negligencia y detención ilegal. Ellos se sumaron a la policía de Baltimore en 2012. De los mismos cargo ha sido acusada la sargento Alicia White, de 30 años, que vio a Gray en la última parada donde recogieron al otro detenido y trató de hablar con el detenido, pero ya no respondía, según la fiscal. Forma parte del cuerpo de policía de Baltimore desde 2010.

 

(elmundo.es)