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Maile Ferrer es pescador y relata que se enteró de la muerte de su novia, la venezolana Lorena Marina Cardozo Bocarruido, a través de un mensaje de texto. Lo recibió el domingo 18 de marzo del 2018.

 

La joven de 21 años fue hallada sin vida, desnuda, junto a una vía de Manabí-Ecuador, cerca de la ciudadela Sí Vivienda, en Montecristi. Un volquetero la vio el sábado 17 de marzo.

 

Ferrer dice que no había hablado con su novia desde el miércoles 14 de marzo, estaba en altamar. Recibió el mensaje cuando arribó al puerto de Guayaquil. Entonces, viajó a Manta y llegó al velatorio que se realizó en la parroquia Los Esteros, en la casa donde Lorena vivía con dos familiares.

 

Los allegados de Cardozo no tuvieron noticias de la joven desde el viernes 16 de marzo. De acuerdo con información dada a conocer por Estefanía, prima de la joven, ella salió cerca de las 23:00 a una cena con amigos.

 

El primer reporte de la autopsia de la joven venezolana despertó inconformidad entre sus familiares. De acuerdo con el informe, la joven de 21 años falleció por asfixia por aspiración de líquido gástrico. A pesar de que su cadáver fue hallado desnudo y solamente con el interior a la altura de la rodilla, el informe no indica que Cardozo fue víctima de violación o algún otro tipo de agresión.

 

Sin embargo, la prima de la joven dice que “fue un crimen… Cuando ya la tengo acá en la casa la reviso y sí tiene marcas: en el ojo tiene un arañazo, como si la hubiesen rasguñado en un forcejeo”. Además, Estefanía asegura que halló en la planta del pie de su prima un corazón que habría sido dibujado con una aguja sin tinta, también encontró unos puntos en la sien.

 

El cuerpo de Lorena Marina no fue sepultado hasta la llegada de su padre y de una tía desde Venezuela; la familia no cuenta con los recursos económicos necesarios para la repatriación del cadáver. En el Ecuador, la joven se dedicaba al comercio de arepas y empanadas en la calle.

 

De acuerdo con La Marea, el arribo del padre al país estaba programado para ayer (19 de marzo del 2018). Ese mismo día, familiares y allegados organizaron una protesta con el fin de solicitar a las autoridades justicia.

 

“Estoy dolido. Ella era todo para mí. La forma como la encontraron y las fotos desnuda que subieron a las redes sociales son denigrantes”, dijo Ferrer. A él también le parece extraña la muerte de su novia, y pide que se investigue el caso como crimen y se haga justicia. La pareja llegó a Ecuador debido a la crisis en Venezuela.

 

Hasta el velatorio en Los Esteros llegaron venezolanos que no conocían a Lorena Cardozo, pero querían unir fuerzas y mostrar solidaridad. Unos llevaban ramos de flores, otros colocaban dinero en una caja para ayudar con los gastos funerales.

 

Con carteles protestaron por la muerte de la joven y pedían seguridad para los emigrantes venezolanos en Ecuador. “A las mujeres ni con el pétalo de una rosa. Justicia”, rezaba en uno de los mensajes.

 

Todos pedían justicia por la muerte de Lorena. Hasta el lugar también llegó Jeniffer Valero, a quien le rodaban lágrimas mientras pedía no ser discriminada ni maltratada como Lorena. Ella tampoco la conocía, pero le asusta lo que sucedió.

 

La Fiscalía mantiene abierta una investigación para ubicar a las personas que arrojaron el cadáver y se llevaron la ropa, el celular y los documentos de Lorena.

 

El fiscal Washintong Yaranga informó que están a espera de los resultados toxicológicos para determinar si la joven había sido afectada con algún tipo de droga en la sangre.

 

(El Comercio)

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