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La ceremonia con la que se le dio el puntapié inicial a la Copa del Mundo en Rusia tuvo de todo. Un espectáculo artístico a la altura, Ronaldo, Casillas, una supermodelo rusa, una cantante de opera de la misma nación y Robbie Williams, quien nos dejaría la primera gran polémica de esta cita futbolística. 

 

Mientras interpretaba la conocidísima canción “Rock DJ”, el cantante le levantó el dedo de al medio a la cámara, generando de inmediato las críticas del medio y los internautas. Pero no fue sólo un clásico gesto de rebeldía del inglés, si no que un mensaje con nombre y apellido. 

 

Porque no sólo fue la seña, si no que también la letra. En vez de cantar “most of them fleece me every night”, la modificó y dijo “most of them fleece me but i did this for free”, lo que en inglés sería “la mayoría me despluma, pero hice esto gratis”. En tanto, su cara lo decía todo, no era un cumplido, sino que un ataque.

 

Muchos creyeron que se refería, en general, a las críticas que reciben los artistas cuando aparecen en este tipo de eventos, debido a las sumas de dinero que consiguen. Pero no. El ataque iba teledirigido a Bill Browder, un empresario británico y constante crítico de Vladimir Putin, quien hace sólo 2 días le dedicó un tuit al artista.

 

“Hay muchas formas de ganar dinero @robbiewilliams -sí, hasta lo etiquetó-, pero venderle tu alma a un dictador no debiera ser una de ellas. Debería darte vergüenza”, agregando también los nombres de algunas víctimas del presidente ruso, según Browder.

 

En ese entonces, Williams no contestó y aprovechó una instancia mucho más “idónea” para hacerlo: frente a millones de televidentes que veían la inauguración del Mundial en Rusia. 

 

El empresario recibió el mensaje correctamente y le dedicó otra publicación al cantante, contrastando su ya icónica imagen con las de Peter Tatchel, un activista de derechos humanos que fue arrestado por el gobierno ruso, mientras que afirmó que Williams estaba “furioso por su llamado de atención al legitimar a Putin”. 

 

¿Se acabará acá la polémica? Con Robbie nunca se sabe. 

 

(Upsocl)