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Fiel reflejo de los tiempos que corren de reposicionamientos en el tablero de las relaciones internacionales, la cumbre del Mercosur de este 18 de junio en Luque, Paraguay, se declaró militante por el libre comercio. Y anunció que orientará sus esfuerzos asociativos con la Unión Económica Euroasiática y potencias emergentes como China y Rusia. 

 

«Sobre la Unión Euroasiática y Rusia específicamente», dijo el canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, el objetivo de la Presidencia Pro Tempore que Uruguay ejercerá hasta fin de año «es convocar una primera reunión de acercamiento para evaluar la agenda comercial conjunta». Y destacó que «la Unión Euroasiática ha dado renovadas señales de interés en iniciar un proceso negociador en el Mercosur». 

 

Por otro lado, el ministro sostuvo que su país insistirá en iniciar gestiones para un acuerdo comercial con China. 

 

Todo esto en un marcado escepticismo latinoamericano sobre la posibilidad de sellar el acuerdo de libre comercio que desde hace más de 20 años se negocia con la Unión Europea. 

 

Durante la cumbre, el mandatario uruguayo, Tabaré Vázquez, trasladó la responsabilidad hacia el otro lado del Atlántico, al decir que el Mercosur presentó «con fuerza, con seriedad y con responsabilidad» una oferta que abarca 92% de su universo exportador, con lo que ahora «la palabra» la tiene el bloque comunitario.

 

Además de Vázquez participaron del la cumbre los presidentes de Paraguay, Horacio Cartes, y de Brasil, Michel Temer, mientras que Argentina estuvo representada por su vicepresidenta, Gabriela Michetti, y  Bolivia por el suyo, Álvaro García Linera.

 

«Si el énfasis brasileño (NdR: país que dejó la presidencia del bloque a fines de 2017) era la Unión Europea, en la de Paraguay hemos visto diversificar los acuerdos extrarregionales: tuvimos la apertura oficial de negociaciones con Canadá, con Corea del Sur y también la formalización de los diálogos institucionales entre la Alianza del Pacífico y Mercosur», enumeró a Sputnik Gustavo Rojas, investigador del Centro de Análisis y Difusión de la Economía Paraguay. 

 

«Es inevitable que el Mercosur se proyecte hacia el Pacífico», afirmó Rojas, al anunciar que tras las elecciones generales del 1 de julio en México, ese país será sede de la primera cumbre de presidente del Mercosur y la AP.

 

Sobre esta convergencia, Sputnik consultó al senador uruguayo Marco Otheguy, del oficialista Frente Amplio, quien la consideró como una «posibilidad más de seguir avanzando en esa apertura al mundo. Es claro que en el siglo XXI se han producido cambios muy profundos en las economías y en el funcionamiento comercial. Países como los nuestros tienen que encontrar una estrategia compartida que nos permita insertarnos con eficacia en las cadenas globales de valor».

 

También reafirmó el camino Chino que seguirá su país durante estos seis mese al frente del bloque regional: «En esta etapa creo que es fundamental retomar algunos objetivos que Uruguay viene trabajando desde hace un tiempo, como por ejemplo un acuerdo comercial con China». 

 

(Sputnik News)