Kawa Leauma, jugador de la selección española de rugby, falleció este martes luego de varios días internado en un hospital de Países Bajos, donde había sido ingresado el sábado pasado tras caer al vacío durante una fiesta en un centro comercial de Ámsterdam, donde celebraba junto a sus compañeros la victoria ante el conjunto local por el Campeonato de Europa.

La noticia, confirmada por la Federación de rugby de España, causó rápidamente estupor en el mundo de la ovalada y obligó a activar un protocolo de emergencia para poder hacer viajar a la esposa de Leauma, quien vive en Nueva Zelanda junto a sus tres hijos.

El segunda línea, nacido en Nueva Zelanda pero de origen samoano, había sido nacionalizado recientemente e incluso viajó a Países Bajos pese a que no iba a jugar, porque la Federación española temía sanciones por una alineación indebida hasta la habilitación definitiva, ya que había disputado varios partidos de juveniles con la selección samoana.

Dadas las estrictas medidas sanitarias vigentes en Países Bajos por el creciente número de contagios por coronavirus, no hubo tercer tiempo tras el partido, pero algunos jugadores de ambas selecciones sí coincidieron en un local recreativo, lugar en el que se produjo el accidente.

Leauma cayó al vacío desde unos seis metros en una zona mal señalizada y se golpeó fuertemente la cabeza, sufriendo un traumatismo craneoencefálico.

El jugador del club AMPO Ordizia, de 32 años, fue trasladado a un centro hospitalario donde fue intervenido de urgencia, permaneciendo en observación.

Si bien en las primeras horas se observó cierta mejoría en su estado de salud, este martes la Federación española ha confirmado su fallecimiento, después de que no haya podido superar las lesiones producidas por la caída.

Leauma debutó en octubre pasado con la selección española ante Italia A, pero al no ser considerado un partido oficial existían dudas sobre su elegibilidad y finalmente no participó en el choque ante Países Bajos.

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