La defensa del representante diplomático colombovenezolano Alex Saab negó la participación del también empresario en presuntas transas irregulares con los expresidentes Rafael Correa (Ecuador) y Juan Manuel Santos (Colombia), según consta en una comunicación difundida a la prensa. 

«Alex Saab no tiene vínculo ni ha realizado negocio alguno con los expresidentes Santos y Correa», aseguró el equipo legal del empresario, que además reiteró que en 2016 fue sobreseída una causa relacionada con estas acusaciones, pretendidamente presentadas como recientes. 

Así, en el texto se recoge que «Saab no formaba parte de las compañías que fueron investigadas y posteriormente absueltas en el marco de dicha causa penal».

Esta declaración se produjo después de que congresistas ecuatorianos entregaran al presidente colombiano, Iván Duque, un ‘dossier’ en el que se daría cuenta de una trama trasnacional de corrupción en la que estarían implicados los gobiernos de Hugo Chávez, Juan Manuel Santos y Rafael Correa, así como algunos políticos de Venezuela, Colombia y Ecuador. 

Desde la Casa de Nariño, Duque sostuvo que la «estructura de crimen transnacional liderada por Alex Saab» tenía como finalidad «financiar campañas políticas» y realizar «operaciones que estaban vinculadas con la corrupción en distintos lugares del continente y del mundo».

Según el mandatario neogranadino, la comisión le entregó «una exposición clara, detallada, y certera de una larga pesquisa de operación internacional de blanqueo de activos, blanqueo de dinero y financiación ilegal de actividades políticas», en la que también habrían participado «personas cercanas a gobiernos de varios países», entre los que se contarían Venezuela, Ecuador y Colombia.

Empero, pese a las acusaciones formuladas por Duque, en el seno de la Asamblea Nacional ecuatoriana existen serias dudas acerca de la veracidad de lo expuesto en el informe, en tanto Fernando Villavicencio, presidente de la Comisión de Fiscalización y Control Político y promotor de esta causa, ha sido demandado y condenado por injuria. 

Una investigación publicada por el portal de periodismo de datos abiertos La Tabla, mostró que Villavicencio presionó para la aprobación expedita de un informe que consignara 24 horas antes, en el que supuestamente constaban «esquemas de exportaciones ficticias de paneles solares de Ecuador a Venezuela», como denunciara el parlamentario Roberto Cuero Medina, perteneciente a la Alianza UNES, partido de Correa. 

En su intervención, Cuero sostuvo que el documento presentado por Villavicencio  estaba «lleno de bulos y acusaciones virulentas», con el que además se pretendió relacionar al exmandatario ecuatoriano con base en la visita que hicieran el pasado noviembre «autoridades y funcionarios del correísmo» a la Asamblea Nacional, en la que se les pidieron explicaciones acerca de las «exportaciones con el sistema de compensación Sucre», si bien ninguna persona vinculó a Correa con los hechos. 

De otro lado, los representantes legales de Alex Saab advirtieron que las autoridades de Colombia estarían usando el caso para «generar un hecho político (…) en plena época electoral», por lo que insistieron en que es «necesario que se investigue por parte de las autoridades ecuatorianas el inusitado interés de diputados ecuatorianos por generar noticias falsas a partir de hechos que ya han sido clarificados».

Según reseñó la agencia Europapress, el informe contiene 125 paginas, en las que  «también se acusa a los expresidentes Rafael Correa, Hugo Chávez y Juan Manuel Santos de estar involucrados en esta trama orquestada por Saab y su socio Álvaro Pulido» con las que presuntamente «se habrían blanqueado unos 160 millones de dólares».

En particular, se aludiría a la causa por la que Saab ya fue sobreseído en 2016: un convenio suscrito entre los entonces presidentes de Colombia y Venezuela, Juan Manuel Santos y Hugo Chávez, para ensamblar viviendas prefabricadas en Venezuela por intermediación de Fondo Global de Construcción y que serían exportadas desde Ecuador.

A pesar de esto, en el documento entregado a Duque y difundido parcialmente por medios colombianos y agencias internacionales, se insiste en que «esta empresa no exportó una sola casa prefabricada de Ecuador a Venezuela –como era su objetivo–, sino que fue una fachada: el objetivo [del gobierno de Correa] era apropiarse de las reservas de libre disponibilidad de Ecuador y el objetivo del ‘chavismo’ era acceder a los dólares de la reserva ecuatoriana», señaló esta comisión.

(LaIguana.TV)