Las autoridades de Tonga, país situado en el océano Pacífico, confirmaron la muerte de al menos tres personas tras la erupción de un volcán, seguida por el tsunami que se saldó con la demolición de viviendas en la isla de Mango, comunicó la agencia AAP.

Antes se informó de una británica fallecida.

El Gobierno tongano también confirmó la muerte de una habitante de la isla de Mango de 65 años y de un hombre de 49 años en la isla de Nomuka.

La isla de Fonoifua sufrió daños importantes donde tan solo quedaron dos casas intactas.

Se trata de islas diminutas con aldeas de una docena de hogares o poco más.

Las autoridades enviaron barcos para evacuar a los residentes de las islas afectadas.

Además, el coordinador de las Naciones Unidas en Fiyi, Jonathan Veitch, citado por la radio RNZ, afirmó que varias localidades de Tonga no están en contacto.

La mayor preocupación es la falta de agua potable. La mayoría de los habitantes de las islas utilizan el agua de lluvia, pero ahora está contaminada por cenizas volcánicas.

Según RNZ, dos barcos de la Marina de Nueva Zelanda se dirigen a las islas de Tonga con agua, artículos de primera necesidad y buceadores.

El sábado el volcano Hunga Tonga-Hunga-Haapai, ubicado a 65 kilómetros al norte de la capital Nukualofa, tuvo la erupción más fuerte en las últimas décadas, según algunas estimaciones.

La erupción provocó un tsunami que cubrió toda la zona, incluida la capital, con ceniza volcánica.

La situación de emergencia fue declarada en la costa occidental de la isla principal del archipiélago, Tongatapu.

(Sputnik)