Los sueños trazados sí se pueden cumplir, así lo demostró la guitarrista venezolana, Andrea Ferrero, quien contó a sus 21 años de edad la maravillosa experiencia de su vida. La joven oriunda de Caracas narró en Twitter cómo llegó a ser parte del equipo de la productora Happy Madison Productions en Los Ángeles, Estados Unidos, propiedad del actor de cine Adam Sandler.

“Estoy escribiendo esto desde Los Ángeles, CA. Pensar que hace unos años me encontraba en mi cuarto en Caracas viendo sus películas”, con este escrito inició la historia de la muchacha que toca la guitarra eléctrica.

Explicó que todo comenzó en la capital venezolana cuando estaba en pleno apogeo la crisis económica y política en el país.

Su pasión la encontró en una guitarra y su sueño estudiar en Berklee College of Music

Comentó que desde los 10 años se enamoró de la guitarra; sin embargo, “vivir de la música en esas condiciones era casi imposible” por lo que vio que sus sueños “se veían cada vez más lejos”.

Ferrero señaló que a los 14 años formó su primera banda y empezó a tocar con varios artistas por Venezuela: La Melodía Perfecta, Sixto Rein, Gustavo Elis y Corina Smith.

No obstante, desde que incursionó en el mundo musical su gran objetivo era estudiar en Berklee College of Music en Boston, EE. UU., “una de las mejores universidades de música del mundo”.

Por lo que un día decidió buscar la información y todo lo referente al caso. Sin recursos para viajar o para cancelar la matrícula su única alternativa era audicionar a distancia y optar por una beca.

“Encontré una manera de hacer la audición online, pero eso también era un problema por el internet de mi casa. Intenté varias veces ya que ellos antes de la audición mandaban una prueba para medir la velocidad del internet y el mío fallaba todos los intentos”, detalló.

Después de superar los inconvenientes logró concretar su audición, para la cual se preparó durante 4 meses componiendo el tema que quería presentar y aprendiendo inglés.

“Quería dar lo mejor de mí en esos 15 minutos de audición y entrevista. Mostrarles quién era y mi deseo de hacer algo grande con mi música”, expresó Andrea.

La muchacha cumplió con su prueba y pasó mucho tiempo sin saber qué había pasado con su audición. Posteriormente recibió dos cartas: una de aceptación y otra en la que ofrecieron una beca completa. Resultó que todo fue una total sorpresa. “¡No lo podía creer!”, exclamó.

Dejar familia, amigos y seguir sola

Salir de Venezuela no fue nada fácil porque tuvo que despedirse de la familia y amigos. “Sin saber cuándo los podrás volver a ver es una sensación horrible”, acotó.

Tuvo que ser fuerte y continuar sola su camino. Además, la situación económica tampoco le resultó nada cómoda. Pese a que fue adjudicada con una beca completa tenía que cubrir gastos de vivienda, comida, seguro, entre otros servicios.

Ante el escenario decidió crear una campaña de gofundme. “Muchos me ayudaron. Me llamaban de emisoras de radio para ayudar a promocionar mi campaña. Siempre estaré agradecida. Y así llegué a Boston, gracias al apoyo de muchos y de no haberme dado por vencida”, apuntó.

En 3 años que habitó en esa ciudad, vivió experiencias increíbles que le cambiaron la vida; como por ejemplo, tomar clases de guitarra con uno de sus ídolos: Tomo Fujita. (Ex-Profesor de John Mayer).

Otras que no fueron tan agradables, como la imposibilidad de pagar una habitación para ella sola, por lo que compartió una con otras personas. “Recuerdo que una vez agarre la esquina del apartamento de un amigo y le puse una cortina y una cama. Lo llamé ‘mi cuarto'», reseñó.

Algo lamentable fue cuando el edificio donde residía se incendió y perdió todo, ropa, pedales, guitarras. “Mi familia y amigos siempre estuvieron apoyándome. Por lo que me di cuenta que en realidad eso es lo que importa en la vida”, agregó.

Un verano en Boston marcó su destino

Un día de verano en Boston conoció a una persona que indudablemente cambió su vida: Adam Sandler. “Él estaba con su equipo grabando su película ‘Hubie Halloween’ en un pueblo llamado Salem a media hora de Boston. Siempre ha amado la música, le encanta tocar guitarra, por lo que conectamos rápidamente. Luego de eso siempre seguimos en contacto. Yo le mandaba videos míos tocando y él me daba su opinión o me pedía que le mostrara cómo tocar algunas cosas”, relató.

La caraqueña acotó que tras varios meses le propusieron ir a Los Ángeles para realizar una pasantía en su compañía Happy Madison Productions donde trabajó con los editores y supervisores de música para sus películas.

Contó con la oportunidad de conocer a una gran cantidad de personas, entre ellos compositores que toda la vida ha admirado como Rupert Gregson Williams, compositor de “Mujer Maravilla”, “Aquaman”, y de casi todas las películas de Adam Sandler como: “Ese es mi hijo”, “Click”, “Son como niños” y “Jack and Jill”.

Al terminar la pasantía regresó a Berklee, culminó su carrera y se mudó a Los Ángeles para trabajar oficialmente en Netflix y en Happy Madison Productions.

“Hoy en día soy parte de todo el proceso musical en las películas, desde trabajar con los editores de música hasta trabajar con los supervisores, e incluso estoy empezando a trabajar con el compositor en las grabaciones de algunos tracks de guitarra para las películas”.

Andrea culminó agradeciendo a todos aquellas que se dedicaron a leerla, para ella “esto es solo una historia más de lucha y de que sí se puede soñar”. Añadió que así como muchos le han manifestado que “los he inspirado con mi historia, sus palabras me inspiran a mí”.

(LaIguana.TV)