El acuerdo alcanzado entre Argentina y el FMI que será votado por el Congreso establece un cronograma de «revisiones» en las que el país deberá mostrar avances ante cada desembolso del nuevo préstamo de 45.000 millones de dólares. El acuerdo comenzará a repagarse en 2026 e implica cambios en tarifas, jubilaciones y otras áreas. 

El acuerdo entre Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI) que comienza a ser analizado en el Congreso argentino comprende una serie de requisitos que el país sudamericano debe cumplir para recibir los desembolsos de dinero aprobado por el organismo multilateral. 

En efecto, el acuerdo con el FMI incluye un ‘Memorándum de Políticas Económicas y Financieras’, en las que se enumeran los objetivos macroeconómicos del Gobierno de Alberto Fernández para superar la crisis del país sudamericano. El mismo apartado establece que el FMI desembolsará los 45.000 millones de dólares en un período de 30 meses que incluye una entrega inicial y diez entregas posteriores después de cada «revisión». 

El nuevo préstamo surge de las negociaciones que Argentina y el FMI mantienen desde 2020 para refinanciar la deuda de 45.000 millones de dólares originada a partir del préstamo que el organismo internacional había otorgado a Argentina en 2018, durante el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019). 

Los desembolsos del FMI a Argentina 

Las entregas están definidas en Derechos Especiales de Giro (DEG), la moneda utilizada por el FMI y cuyo valor se obtiene a partir de una canasta de monedas en la que el dólar estadounidense es la que tiene más peso. Así, 31.914 millones de DEG equivalen a los 45.000 millones de dólares del total del préstamo. 

Las entregas se harán de la siguiente manera, expresadas en DEG: 

7.000 millones cuando el Directorio del FMI apruebe el acuerdo, 

3.000 millones tras la primera revisión, 

3.000 millones tras la segunda revisión, 

4.500 millones tras la tercera revisión, 

4.000 millones tras la cuarta revisión, 

3.000 millones tras la quinta revisión, 

2.500 millones tras la sexta revisión, 

2.500 millones tras la séptima revisión, 

800 millones tras la octava revisión, 

800 millones tras la novena revisión, 

814 millones tras la décima revisión. 

El acuerdo entre Argentina y el FMI prevé que las «revisiones» que el organismo internacional realizará serán trimestrales. En esas instancias, el Fondo Monetario evaluará el grado de cumplimiento de Argentina de una serie de «metas indicativas» y «medidas previas» establecidas en el documento. 

Así, por ejemplo, el acuerdo establece «metas fiscales» a cumplir por Argentina, como llevar el piso del saldo primario del gobierno federal acumulado de -222,3 en marzo de 2022 a -1.758,6 a finales de diciembre de 2022. Los ingresos reales del gobierno federal tendrán que ir de 2.417,3 en marzo de 2022 a 8.900 en diciembre de 2022. Todas las cifras en el documento están expresadas en miles de millones de pesos argentinos. 

El acuerdo con el FMI también incluye varias medidas que Argentina debe adoptar en los meses siguientes, como «llamar a una audiencia pública para discutir una propuesta para ajustar las tarifas de energía mayorista a partir de junio 1 de 2022». También habría un ajuste para las tarifas residenciales, pero según el documento estaría guiado «por la tasa de crecimiento promedio de los salarios». 

Otra de las medidas acordadas entre las partes es que Argentina elabore, «en comunicación con el personal técnico del FMI», un plan para «flexibilizar gradualmente los controles cambiarios, describiendo las condiciones necesarias y los objetivos». 

El punteo también indica que, para diciembre de 2022, Argentina debe publicar un estudio «que describa las opciones y recomendaciones para afianzar la equidad y la sostenibilidad a largo plazo de nuestro sistema de jubilaciones y pensiones». El texto adelanta que ese trabajo deberá focalizarse en «los regímenes especiales de pensiones» y contener «mecanismos para incentivar la prolongación voluntaria de la vida laboral de las personas». 

Varios de los puntos exigidos en el acuerdo establecen que Argentina debe avanzar en ellos en consulta con los técnicos del FMI. Por eso, el mismo acuerdo incluye «una cláusula estándar del FMI sobre consultas». 

Sobre este punto, el Gobierno argentino incluye una aclaración en el proyecto enviado al Congreso: «Estamos seguros de que nuestras políticas son las adecuadas para alcanzar los objetivos del programa y estamos listos para tomar las medidas adicionales que sean necesarias para tales fines».  

De todos modos, el Gobierno argentino hace una precisión sobre su voluntad de cumplir con lo acordado con el organismo.  

«Consultaremos con el FMI sobre la adopción de estas medidas y en forma previa a cualquier revisión a las medidas contenidas en este Memorando, y evitaremos cualquier política que no sea consistente con los objetivos del programa y nuestros compromisos en el contexto de este», aclara el Gobierno argentino. 

¿Cuándo pagará Argentina el nuevo préstamo del FMI? 

Según el Gobierno argentino, el acuerdo alcanzado con el FMI permitirá a Argentina obtener «un período de repago posible que fortalece la sostenibilidad de la deuda». 

En efecto, el texto indica que, al ser un programa de ‘Facilidades Extendidas’ del FMI, «cada desembolso tendrá un período de repago de 10 años, con 4 años y medio de gracia», lo que implica, según el Gobierno argentino, que los primeros pagos comenzarán, recién, en 2026. 

(Sputnik)