Ernesto Paraqueima, alcalde de la ciudad de El Tigre (Anzoátegui), aseguró este miércoles que si bien la unión civil de personas del mismo sexo no está consagrada en la Constitución venezolana, el acto de matrimonio simbólico que se realizó en su municipio sirve para visibilizar a la población sexodiversa.

En una entrevista concedida al periodista Vladimir Villegas, el político, que se asume heterosexual y sostiene que no tiene «complejo alguno en conversar con un homosexual», alegó que «es justo que en la unión de personas homosexuales, si una de ellas fallece, la otra pueda heredar los bienes».

Ante las críticas de aquellos que consideran que no se trata de un tema prioritario, Paraqueima reconoció que «hay problemas más graves en el país», pero defendió su iniciativa porque pretende visibilizar al movimiento LGBTQI.

A su parecer, la discriminación hacia estas personas es comparable a aquellas que tienen una raíz racista. «Somos producto de un mestizaje y no debe haber discriminación por el color de piel», alegó.

Del mismo modo, dirigiéndose a quienes pretenden justificar su rechazo en motivos religiosos, destacó que «La Biblia tiene más de 2.000 años» y que las ideas «evolucionan».

(LaIguana.TV)