Los investigadores del Instituto Karolinska en Suecia han identificado potentes anticuerpos en miniatura de alpaca, a los que denominaron nanocuerpos, que tienen la capacidad de combatir las variantes emergentes del SARS-CoV-2. 

Se trata de múltiples nanocuerpos que fueron descubiertos y puestos a prueba en cultivos celulares y ratones demostrando que son capaces de bloquear de manera efectiva al virus y sus diferentes variantes. 

Los autores del estudio publicado en Science Advances, consideran que este hallazgo podría allanar el camino para desarrollar nuevos tratamientos contra el coronavirus, ya que a pesar de la existencia de vacunas y antivirales consideran que existe la necesidad de terapias intensivas contra el COVID-19. 

Estos diminutos anticuerpos son fragmentos que se encuentran naturalmente en los camélidos y pueden adaptarse a los humanos, esto los convierte en candidatos terapéuticos prometedores porque ofrecen varias ventajas sobre los anticuerpos convencionales. Los científicos destacan que los nanocuerpos tienen propiedades bioquímicas favorables y son fáciles de producir de forma rentable a escala. 

Uno de los nanocuerpos denominado Fu2, fue hallado en una alpaca y los científicos encontraron que se une naturalmente a dos sitios separados en el pico viral inhibiendo la capacidad del virus para ingresar a la célula huésped. Los investigadores también profundizaron en la combinación de los nanocuerpos ofreciendo como resultado una biblioteca de nanocuerpos en detalle. 

«Una vez establecidas, estas bibliotecas pueden expandirse y extraerse en busca de nanocuerpos que neutralicen nuevas variantes emergentes», explicó el coautor del estudio Ben Murrell. 

Los científicos continúan trabajando con las mismas técnicas para identificar los nanocuerpos más eficaces de este conjunto para neutralizar la variante ómicron. 

(Sputnik)