Cinco soldados profesionales colombianos y un civil que vendían armas e información sobre la seguridad del presidente Iván Duque a las disidencias de las FARC fueron enviados a la cárcel, según informó este sábado la Fiscalía.

Los militares, según el comunicado, estaban adscritos a un batallón de fuerzas especiales con sede en Tumaco, población del departamento de Nariño, fronteriza con Ecuador.

Además de vender armas, explosivos y otros elementos de uso privativo de la fuerza pública, daban información «sobre operaciones, desplazamientos de tropa y de aeronaves militares, y la distribución de los grupos que brindaban seguridad durante las visitas del Presidente de la República y otros funcionarios a Tumaco», señala el comunicado.

Según la investigación, los soldados supuestamente están involucrados en el hurto de granadas, armas cortas y largas, uniformes y otros elementos, los cuales eran vendidos al «Frente Oliver Sinisterra» de las disidencias de las FARC.

Los capturados fueron enviados a la cárcel luego de ser imputados por los delitos de «concierto para delinquir agravado, cohecho, revelación de secreto, hurto agravado; y fabricación, tráfico, porte de armas y municiones de uso privativo de las Fuerzas Armadas».

(EFE)