El presidente estadounidense Joe Biden recurrió a los biocombustibles para tratar de bajar los precios de las gasolinas y el diésel, dos energéticos que han registrado alzas considerables desde que comenzó el conflicto en Ucrania.

Entre las nuevas medidas de emergencia que tomará el Gobierno de Estados Unidos está promover la expansión de ventas de los biocombustibles, específicamente la E15, una gasolina que utiliza una mezcla de 15% de etanol.

La medida forma parte de la estrategia de Biden para enfrentar la crisis energética mundial, desatada a raíz de los enfrentamientos entre Rusia y Ucrania, que comenzaron desde el 24 de febrero pasado.

Con esta decisión se verá impulsada la industria estadounidense del maíz debido a que probablemente se incremente la demanda de etanol a base de maíz.

«Este es el último paso para ampliar el acceso de los estadounidenses a un suministro de combustible asequible y para aliviar a los ciudadanos que sufren la subida de precios provocada por [Vladímir] Putin», informó la Casa Blanca en un comunicado.

Se espera que el mandatario demócrata ordene a la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) autorizar una exención de emergencia que permitirá la venta durante todo el año de gasolina E15.

La venta de este biocombustible está prohibida en Estados Unidos de junio a septiembre para proteger la calidad del aire.

«La EPA tiene previsto tomar medidas definitivas para emitir la exención de emergencia más cerca del 1 de junio. El E15 se ofrece actualmente en 2.300 gasolineras del país, donde puede servir como una fuente importante, y más asequible, de combustible», detalló la Casa Blanca.

La medida es anunciada por la Administración de Biden horas después de que Estados Unidos registró su mayor inflación —8,5% anual— desde 1981.

(Sputnik)