Los militares ucranianos escenificaron otra provocación en el sur de su país para difamar a Rusia, afirmó el jefe del Centro Nacional de Gestión de Defensa ruso, Mijaíl Mizíntsev.

Precisó que la provocación fue filmada en la localidad de Voskresénskoe, ubicada en la provincia ucraniana de Nikoláev.

«Bajo las órdenes del comando de las Fuerzas Armadas de Ucrania, especialistas en operaciones técnico-psicológicas escenificaron ‘actos de saqueo’ supuestamente cometidos por militares rusos contra la población civil: vestidos con uniformes rusos los combatientes del batallón 191 de la brigada 123 de las Fuerzas de Defensa Territorial, usando automóviles con emblemas con la letra Z, robaban desafiantemente casas privadas y grababan sus atrocidades con teléfonos móviles», dijo Mizíntsev en una rueda de prensa.

Más temprano, la Milicia Popular de la República Popular de Lugansk (RPL) informó que las tropas ucranianas planean realizar provocaciones en la república con el uso de misiles Tochka-U, durante la Pascua ortodoxa, para acusar a los militares de la RPL y Rusia de asesinatos masivos de civiles durante la Vigilia pascual.

El presidente de Rusia, Vladímir Putin, anunció en la madrugada del 24 de febrero el lanzamiento de una «operación militar especial» en Ucrania, alegando que las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, necesitan ayuda frente al «genocidio» por parte de Kiev.

Uno de los objetivos fundamentales de esa operación, según Putin, es «la desmilitarización y la desnazificación» de Ucrania.

Según el Ministerio de Defensa ruso, los ataques militares no están dirigidos contra instalaciones civiles, sino que buscan inutilizar la infraestructura bélica.

El pasado 29 de marzo, la autoridad castrense rusa reafirmó que da por cumplido el objetivo esencial de la primera fase de la operación, que era mermar la capacidad bélica de Ucrania, y se enfocará en adelante en la «liberación de Donbás».

(Sputnik)