Las autoridades de Suiza anunciaron un nuevo paquete de sanciones contra Rusia, que incluyen un veto a la importación de carbón, según reveló el Consejo Federal suizo.

«Las nuevas medidas incluyen sanciones de gran alcance a los bienes, en particular la prohibición de las importaciones de lignito y carbón, así como de materias primas que son importantes fuentes de ingresos para Rusia [por ejemplo, madera, cemento, mariscos, caviar]», indica un comunicado del Gabinete.

El documento precisa que además en el territorio ruso «existen programas de exportación de mercancías que pueden ayudar a fortalecer las capacidades industriales de Rusia (por ejemplo, robots industriales o ciertos productos químicos)», y la importación de esos productos también debe ser proscrita.

Numerosos países condenaron la operación militar que Rusia lanzó el pasado 24 de febrero, con el objetivo de «desmilitarizar» y «desnazificar» Ucrania, y activaron varias baterías de sanciones individuales y sectoriales que buscan infligirle a la economía rusa el mayor daño posible en un intento de presionar a Moscú para que frene las hostilidades.

Por vez primera, las sanciones incluyen la desconexión parcial de Rusia del sistema SWIFT, la inmovilización de las reservas internacionales de su Banco Central y, en el caso de países como Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido y Australia, el embargo sobre la importación de petróleo ruso.

Decenas de empresas anunciaron desde finales de febrero la decisión de suspender sus negocios en y con Rusia.

Según la base de datos Castellum.AI, Rusia es ahora el país más castigado por las sanciones, por delante de Irán, Siria, Corea del Norte y Venezuela. Desde mediados de febrero pasado, se activaron más de 7.100 nuevas medidas restrictivas en su contra, en adición a las más de 2.750 que ya estaban en vigor.

(Sputnik)