Los países europeos no podrán sustituir el gas de Rusia sin realizar una transición energética, declaró el director general de la empresa Shell, Ben van Beurden. 

Tendremos que «realizar inevitablemente una transición energética a mediano plazo» porque «simplemente no hay posibilidad de comprar más gas natural licuado y por gasoducto para reemplazar completamente todo el gas ruso que consumimos ahora, no es viable», dijo durante una conferencia telefónica dedicada a los resultados de Shell en el primer trimestre de 2022. 

Agregó que, entre las medidas posibles, su empresa considera suministrar al mercado más gas natural licuado, más instalaciones de licuefacción y regasificación, así como aumentar los suministros por gasoducto de África del Norte y Escandinavia. 

Rusia —el mayor exportador de gas a Europa— suministra cerca del 40% del «combustible azul» consumido en la región a través de varias rutas: Nord Stream que conecta a Rusia y Alemania por el fondo del mar Báltico; el sistema de transporte de gas de Ucrania; Yamal-Europa, vía Polonia; y Turk Stream, a través del mar Negro. 

(Sputnik)