Un robo no terminó como lo planearon. Las cámaras de seguridad grabaron cuando unos empleados evitaron el robo de una joyería en California por un grupo de hombres encapuchados.

Dallas y Sarah Baca, dos hermanos quienes son empleados de la joyería de su padre, defendieron su patrimonio con patadas y puñetazos.

El suceso se dio en una joyería de Huntington Beach en Los Ángeles, California. Los asaltantes ingresaron al establecimiento y de inmediato rompieron una vitrina.

Los hermanos de inmediato, cuando los hombres se disponían a romper otro cristal, defendieron su patrimonio pese al intento de los ladrones de llevarse las prendas.

Los cuatro asaltantes que ingresaron a la joyería Princess Bride Diamonds iban vestidos con mochilas, chaquetas negras y martillos en sus manos.

Un tercer trabajador frustró el robo y se abalanzó sobre ellos con una silla en las manos, logrando que los raptores dieran pasos hacia atrás hasta salir del sitio.

Empleados y dueño frustraron el robo

De acuerdo a las imágenes del video, el dueño, los empleados (dos eran sus hijos), se llenaron de valor. Uno de los forajidos arrojó el martillo que tenía hacia el personal de la joyería, quienes según imágenes no sufrieron mayor daño.

“En algún momento, mientras luchaba contra ellos, uno me golpeó en la cabeza con un martillo, pero ni siquiera me di cuenta hasta que se fueron porque había mucha adrenalina”, informó Dallas (hijo del propietario) a los medios locales.

Poco después del hecho, Sarah, hija del propietario, se dispuso a llamar a la policía asegurando que la joyería en los 16 años que tiene nunca habían sido víctima de robo.

Por otra parte, el Departamento de Policía de Huntington Beach, comunicó que los ladrones, lograron llevarse aproximadamente $7,700 dólares en objetos de valor pese a lo ocurrido.

A pesar de que estas personas corrieron con suerte, la policía recomendó que en casos de robos o de alguna situación que pongan en riesgo la vida, lo mejor es no involucrarse.

(Agencias)