“Rusia está logrando sus objetivos militares. Se está cayendo a pedazos la narrativa occidental de que Ucrania estaba ganando la guerra y que a Rusia le estaba yendo mal, pues, por el contrario, cada día obtiene importantes avances. Sin embargo, el conflicto no va a acabar mientras se le sigan enviando armas a una Ucrania ya derrotada”, expresó Miguel Ángel Pérez Pirela al hacer un balance de los primeros tres meses de la conflagración entre la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y Rusia, en territorio ucraniano. 

“Es un momento para preguntarse si se normalizó la guerra después de tres meses, si ya nos parece algo normal. Responder esto es importante para sentar las bases de una reflexión y un análisis a futuro. Pensamos que Ucrania es el preámbulo de una serie de conflictos entre los que destaca el de la OTAN contra China, con el argumento de defender a Taiwán”, señaló el filósofo y comunicador político venezolano en su programa Desde Donde Sea.  

“Todo indica que el propósito detrás del intento de expansión de la OTAN hacia las fronteras rusas y de las sanciones económicas impuestas a Moscú es quebrar a Rusia como competidor económico, militar y científico de EE.UU., un país que experimenta la debacle de su economía y ve en estas sanciones la oportunidad de tomar aire y volverse un poco más competitivo, pero las cosas no le están saliendo bien porque el rublo sigue robusteciéndose”. 

Indicó que EE.UU. confió en que el mundo lo acompañaría en las medidas coercitivas contra Rusia, pero eso está por verse, incluso entre sus más cercanos aliados de Europa, “porque cuando se trata de atacar el negocio energético, muchos países se echan atrás”.

Comentó el rol que ha cumplido en estos tres meses el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, señalando que “ahora está en el Foro de Davos, en los festivales de cine en Francia, en los actos de Hollywoodm. Es una estrella que solo sabe solo de espectáculos y actuación en el peor sentido de esas palabras”, enfatizó. 

Mostró El Iguanazo, de Iván Lira, una caricatura que se refiere a la “Corporación Muerte, C.A”. Dos figuras de la parca se encuentran frente a frente. Una lleva su típica indumentaria oscura; la otra viste con la bandera de Estados Unidos. La primera pregunta: “¿Y esa pinta?”; la segunda responde: “Uniforme con colores corporativos”. 

Los hechos

La guerra en Ucrania arriba a su tercer mes y no tiene un final claro a la vista. En medio de enconados combates en todo el este y una parte del sur del país, Rusia ha avanzado posiciones y las fuerzas de Kiev han retrocedido, al tiempo que las conversaciones de paz están suspendidas desde finales de marzo.  

Desde el Ministerio de Defensa de Rusia se aseguró que se cumplirán los objetivos militares previstos, aun a pesar de las sanciones, a la presencia de mercenarios extranjeros y a la creciente dotación bélica de Ucrania con armamento letal procedente de occidente.  

Asimismo, se acusó a los países de la OTAN de lanzar campañas de desinformación sobre las causas reales de la crisis y se insistió en que, como preparación para una guerra con Moscú, Ucrania pretendía construir armamento nuclear y biológico con auspicio estadounidense.  

La Cancillería rusa denunció asimismo que Estados Unidos y sus aliados de la OTAN están haciendo todo lo posible para prolongar el conflicto en Ucrania y volverlo aún más sangriento, según dijera este miércoles la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova. 

Un titular de LaIguana.TV  se hace eco de esta información: Rusia denuncia: EE.UU. y la OTAN quieren prolongar la crisis en Ucrania y agravarla. 

El texto dice que Zajárova manifestó que «más de 30 Estados, principalmente países de la OTAN, ante el temor de una derrota completa de las fuerzas armadas ucranianas, brindan ayuda militar a Ucrania por decenas de miles de millones de dólares», acciones que, en su criterio, solamente contribuirán con la destrucción de Ucrania.  

Del mismo modo, la diplomática advirtió que el incesante envío de armas occidentales al frente está creando la ilusión de que el conflicto ruso-ucraniano puede resolverse en el campo de batalla y «no contribuye a la formación de la atmósfera política y diplomática tan necesaria para la distensión».  

Las palabras de Zajárova no son gratuitas, pues el pasado 21 de mayo, autoridades ucranianas expresaron que no están dispuestas a decretar un cese el fuego para discutir un acuerdo con Rusia.  

Otro titular de LaIguana.TV indica: Se alarga la guerra: Ucrania no acepta ninguna tregua con Rusia. 

Según expresara a Reuters un asesor del presidente Volodímir Zelenski, «Kiev no aceptaría ningún acuerdo con Moscú que implique la cesión de territorio», porque esto sería interpretado por el Kremlin como una señal de debilidad.  

«La guerra no se detendrá [después de cualquier concesión]. Simplemente, se detendrá por algún tiempo (…). Después de un tiempo, con renovada intensidad, los rusos reemplazarán sus armas y fuerzas, corregirán sus errores y comenzarán una nueva operación», argumentó el consejero. 

Zelenski reconoció que «indudablemente» se celebrarán conversaciones de paz con Rusia en un formato que aún no se ha definido, aunque ratificó lo señalado por su asesor en relación con la cesión de territorios.  

Un par de días más tarde, el mandatario dijo en el Foro de Davos que solamente aceptará reunirse con su homólogo Vladímir Putin para discutir el fin de la guerra. 

Desde el gobierno ruso calificaron estas declaraciones como «un esfuerzo de relaciones públicas» e instaron a Zelenski a familiarizarse con la metodología que se sigue para organizar cumbres y suscribir acuerdos, que implica arduas jornadas de trabajo y acciones coordinadas durante largo tiempo.   

Aunque el Kremlin afirmó que Ucrania debía dar los primeros pasos para reactivar las negociaciones, el pasado lunes, la Cancillería rusa anunció que las autoridades del país eslavo están estudiando la propuesta de paz presentada por Italia ante las Naciones Unidas.  

Según versiones difundidas por medios italianos, el plan contempla el cese el fuego, la desmilitarización progresiva del frente, la neutralidad de Ucrania y su adhesión a la Unión Europea, la definición del estatus de Crimea y las repúblicas del Donbás, así como la elaboración de un nuevo Plan de Paz y Seguridad para Europa. El plan contempla cuatro etapas para restablecer la paz. 

De otro lado, es claro que Moscú tampoco está apostando por una política de desarme y ante el inminente ingreso de Finlandia a la OTAN, comunicó que crearía 12 unidades militares para hacer frente a lo que considera una nueva amenaza. 

Según el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, estas tropas se ubicarán en la frontera occidental del país a finales de 2022 y dispondrán de armamento y equipos militares de última generación.  

Para justificar este despliegue de fuerza, Shoigú indicó que la intensidad de los vuelos estratégicos realizados por la OTAN sobre Europa es 15 veces superior a la que se registraba en 2014, mientras que buques estadounidenses realizan constantemente maniobras en el mar Báltico.  

En cualquier caso, el interés de Estados Unidos y sus países aliados en prolongar artificialmente la guerra, no está exento de críticas desde sus propias filas.  

En su intervención en el Foro de Davos, Henry Kissinger, exsecretario de Estado de los Estados Unidos, instó a occidente a entablar rápidamente conversaciones de paz y sugirió que Ucrania debía ceder el territorio en conflicto a Rusia para evitar una confrontación directa entre ese país y la alianza atlántica.  

Kissinger opina que la guerra cerró la puerta para que Ucrania se transformara en una nación neutral que sirviera de puente entre Moscú y Europa, como aconsejó en 2014 tras el inicio de la guerra en el Donbás, en lugar de convertirse en la última barricada de la OTAN antes de llegar a suelo ruso.  

Analistas coinciden en que si bien las negociaciones iniciaron con buen pie e incluso se aventuró que el conflicto podía acabar rápidamente, Ucrania se levantó de la mesa por presiones de los países de la OTAN, que estarían interesados en sacar provecho económico de las duras sanciones impuestas a Rusia.  

¿La quiebra de Rusia? el plan real de las élites económicas 

En paralelo, van cumpliéndose uno a uno los pronósticos que formularon la mayor parte de los expertos: crisis multidimensional en Europa, inflación en todo el mundo y una creciente presión sobre el mercado de alimentos que podría derivar en una hambruna, especialmente en los países del sur.  

Del otro lado del tablero, la economía rusa, indudablemente golpeada por las sanciones, ha logrado capear el temporal y ha conseguido anotarse unos cuantos tantos estratégicos.  

Entre estos figuran la revaluación del rublo, el relajamiento de las operaciones en divisas dentro del territorio de Rusia y la conservación de buena parte de su mercado energético en Europa.   

Del mismo modo, Rusia pudo frenar la caída de su producción petrolera por medio de una nutrida agenda diplomática, que han incluido la visita de altas autoridades a países exportadores de hidrocarburos como Argelia, Qatar e Irán y el reimpulso de foros regionales asiáticos.   

Otro titular de LaIguana.TV se pregunta: ¿Qué pasará con la producción petrolera de Rusia en 2022?  

Según el viceprimer ministro de Rusia, Alexandr Nóvak, la producción petrolera del país se reducirá a 480-500 millones de toneladas en 2022, frente a los 524 millones que se computaron en el ejercicio anterior.  

Aunque esta cifra implica una caída próxima al 9%, Nóvak se mostró optimista y manifestó que, en las actuales circunstancias, «toda cosa puede cambiar», probablemente en alusión a la potencial clientela de Moscú en el oriente. 

Reportes oficiales indican que Rusia incrementó sus ventas de petróleo a países de Asia-Pacífico, que aparentemente fungirán como intermediarios para que naciones de la Unión Europea que impusieron sanciones puedan comprar el crudo que necesitan.  

También, fuentes estadounidenses comunicaron que en vista del fracaso de la política de embargo que impulsan las autoridades de Bruselas, Washington propondrá a los ministros de Finanzas del G-7 imponer aranceles sobre el petróleo ruso.  

Por otro lado, la gigante energética Gazprom informó este 24 de mayo que todas las importadoras de gas de capital griego comenzarán a honrar sus obligaciones en rublos.  

Aunque Atenas no ha hecho pronunciamientos oficiales al respecto, esta acción deja en evidencia que Grecia, otro país miembro de la Unión Europea, se niega a embarcarse en el boicot contra los hidrocarburos rusos que impulsan vivamente otros miembros de la alianza.  

Según los datos oficiales, Grecia importa de Rusia entre el 45% y el 55% de todos sus requerimientos de gas, por lo que no pueden cortar el lazo con un proveedor tan importante sin perjudicar seriamente a su población.  

Tras bambalinas –y en concordancia con informes de agencias occidentales como Bloomberg o Reuters– a la fecha, cerca de la mitad de las empresas europeas que tienen contratos con Gazprom, optaron por desoír a Bruselas y pagarán en rublos.  

Puertas adentro, el panorama tampoco es tan catastrófico para Rusia como se había previsto. El desempleo, en lugar de dispararse, descendió ligeramente, las compañías locales continúan satisfaciendo la demanda interna y se decretó un aumento del 10% del salario mínimo y las pensiones.   

Sin embargo, el presidente Vladímir Putin admitió que la inflación acumulada en 2022 alcanza el 11% y destacó que esto no se debe necesariamente a las sanciones occidentales, sino que se inscribe en una tendencia global.   

Asimismo, según Putin, el mayor desafío consiste en reducir la pobreza, un objetivo que ya su administración se había trazado antes del inicio de la guerra al que no planea renunciar.   

La agenda internacional del mandatario ruso también ha estado particularmente movida en las últimas jornadas. El pasado lunes sostuvo un encuentro presencial con su homólogo bielorruso, Aleksandr Lukashenko, considerado su más estrecho aliado regional.  

Este jueves participó en la plenaria del Foro Económico Euroasiático, un bloque conformado por cinco exrepúblicas soviéticas: Rusia, Armenia, Kazajistán, Bielorrusia y Kirguistán, que tenía como temas centrales la integración regional y la cooperación de los miembros con socios externos.  

Putin, en su intervención en el Foro Económico Euroasiático, sostuvo que «cada vez más países del mundo quieren implementar e implementarán políticas independientes» y no se trata solamente de un deseo de Rusia y de China. 

Aprovechó el escenario para advertir que «ningún gendarme mundial puede detener este proceso global natural» y que tarde o temprano, esos deseos de dominio «simplemente desaparecerán» porque los gobernantes tendrán que hacerle frente a los problemas de sus propias naciones.  

En cualquier caso, el panorama pinta en este momento más arduo para los países europeos que para otras naciones, incluyendo a la propia Rusia, el país más sancionado desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.  

Para especialistas como el sociólogo Ramón Grosfoguel, tras la guerra en Ucrania y el «suicidio» económico de Bruselas –que sin duda ha tomado decisiones que perjudican sus intereses– hay una trama mucho más siniestra que simplemente quebrar a Rusia: un movimiento de la élite económica global para sobrevivir ante la inevitable debacle del capitalismo.  

Siguiendo las tesis del pensador estadounidense Immanuel Wallerstein, Grosfoguel advierte que hay suficientes evidencias tanto de la debacle estadounidense como de los planes que se fraguan en espacios como el Foro de Davos, que en su peor expresión implican la eliminación de miles de millones de personas consideradas como «sobrantes».  

¿Culpa de Rusia? De los crímenes de guerra a la hambruna mundial

En las últimas jornadas, la matriz mediática occidental se ha desplazado de condenar a Rusia por la presunta comisión de crímenes de guerra en Bucha y otras localidades ucranianas a culparla por la crisis alimentaria y riesgo de hambruna que han pronosticado los expertos.  

En el Foro de Davos, la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, acusó a Moscú de provocar una hambruna mundial por impedir la salida de barcos desde el puerto de Odesa (al sur de Ucrania) y robar el grano ucraniano.  

Esta versión contrasta con la denuncia que formulara Turquía (miembro de la OTAN) el pasado fin de semana, según la cual la armada ucraniana bloqueó 21 buques turcos atracados en ese puerto para usarlos como escudo ante una eventual toma de la ciudad por parte de Rusia y propiciar un enfrentamiento entre Moscú y Ankara.  

La semana previa, María Zajárova, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, denunció que los países de la OTAN le cobran a Kiev las armas enviadas al frente con los recursos estratégicos el país, incluyendo el trigo y el maíz.  

Por su parte, Rusia no parece estar interesada en bloquear los puertos del sur de Ucrania, sino en restituir su operación en el menor lapso posible para que las embarcaciones encargadas de distribuir mercancías puedan hacer su trabajo.  

En ese orden, voceros castrenses de la Federación Rusa informaron que equipos técnicos finalizaron las labores de desminado en el puerto de Mariúpol y en la zona marítima aledaña.  

El titular de LaIguana.TV  al respecto dice: Zapadores rusos completan desminado del puerto de Mariúpol: más de 12.000 explosivos fueron desactivados. 

El texto de la noticia señala que el Ministerio de Defensa de Rusia comunicó este 24 de mayo que los zapadores de la flota del mar Negro concluyeron las operaciones de desminado del puerto de Mariúpol y en la costa próxima al mar de Azov.  

De acuerdo con estos informes, en el procedimiento se desactivaron más de 12.000 artefactos explosivos y se retiraron de la zona portuaria embarcaciones y objetos hundidos que dificultaban la navegación.  

Tras completar esta acción, Moscú ofreció habilitar corredores humanitarios en los puertos del sur de Ucrania para que puedan circular mercancías esenciales hacia el extranjero, especialmente granos.  

Las autoridades rusas aseguran que esta propuesta pretende paliar los efectos negativos sobre las cadenas de suministro de las sanciones occidentales, a las que responsabilizan de la creciente inseguridad alimentaria e incluso de una eventual hambruna. 

Un primer paso en esta dirección se produjo este jueves 26 de mayo, pues las fuerzas armadas de la Federación Rusa habilitaron dos corredores humanitarios en los mares Negro y de Azov, con el objetivo de evacuar buques no ucranianos que permanecen bloqueados desde el inicio de las hostilidades.  

De acuerdo con las autoridades rusas, 70 barcos de carga extranjeros pertenecientes a 16 países, tienen semanas retenidos en seis puertos de Ucrania, incluyendo los de Jersón y Odesa.  

Los corredores marítimos estarán disponibles diariamente entre las 8:00 am y las 7:00 pm, hora de Moscú. El primero atenderá a cinco de los embarcaderos sobre el mar Negro y permitirá que los barcos naveguen hacia el suroccidente, al tiempo que el segundo conectará de forma segura el puerto de Mariúpol con el mar Negro.  

La acusación occidental de que Rusia es responsable de la inseguridad alimentaria en el mundo por confiscar el grano de Ucrania y bloquear sus salidas al mar, también puede analizarse en función de la participación de los dos países en el mercado de trigo, el grano más consumido en todo el planeta.  

Si se atiende a las cifras oficiales de 2021, China encabeza la producción mundial con casi 137 millones de toneladas métricas. Le siguen India (109 millones 520 mil) y Rusia (75 millones 500 mil).  

Ucrania se ubica en la sexta posición con 33 millones toneladas métricas y su producción antes de la guerra representaba poco menos de un tercio de la de Rusia.  

Un gráfico publicado por LaIguana.TV muestra el ranking de la producción mundial de trigo en 2021. 

Sin desmerecer el rol del grano ucraniano, es claro que las sanciones contra Rusia tienen mayor impacto que el bloqueo –hasta ahora temporal– del principal puerto de Ucrania.  Así se cae la versión de que el bloqueo a los puertos ucranianos es el culpable de la inseguridad alimentaria. 

A esto se suma que India, el segundo productor mundial, prohibió las exportaciones de este rubro estratégico para proteger a su población del alza de los precios de los alimentos.  

Adicionalmente, mientras que China e India destinan la mayor parte de su producción a satisfacer las necesidades del mercado interno, Rusia lidera indiscutiblemente la lista de exportadores, por encima de Australia, Estados Unidos y la propia Ucrania.   

El sensible tema ya había sido presentado en la sesión de las Naciones Unidas del pasado 20 de mayo. En su intervención, el embajador venezolano, Samuel Moncada, denunció la hipocresía de los países de la OTAN y subrayó el rol de las sanciones en la inseguridad alimentaria mundial.  

Moncada señaló que «no es posible proponer soluciones a la crisis alimentaria mundial y al mismo tiempo trasgredir la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional, amenazar la paz y la seguridad internacionales y violar los derechos humanos de pueblos enteros, especialmente el derecho a la alimentación».  

El diplomático denuncia la mayor ola de medidas coercitivas unilaterales desde la Segunda Guerra Mundial y advirtió que todo plan que ignore el impacto destructivo de estas medidas no es sincero ni creíble y está condenado al fracaso. 

¿Guerra empantanada y aislamiento internacional?

De otro lado, el envío masivo de armas a las fuerzas comandadas por Kiev, tampoco parece haber frenado el avance de Rusia en Ucrania, que en este momento controla casi todo el territorio de las repúblicas de Donetsk y Lugansk, así como una extensa franja del litoral, que comprende el mar de Azov y una porción del mar Negro.  

Rusia ha afianzado su posición de tal manera en las sureñas regiones de Jersón y Zaporiyia, que ya han empezado a establecerse gobiernos locales favorables a una eventual incorporación la Federación.  

Del mismo modo, se ha establecido el ruso como idioma oficial –sin desmedro del ucraniano– y el rublo ha comenzado a circular en paralelo con la divisa de Ucrania (grivna).  

Por su parte, el presidente Putin firmó un decreto de simplificación de trámites para los residentes de esas provincias que deseen obtener la ciudadanía rusa, similar al que permitió la nacionalización de cientos de miles de habitantes de Donetsk y Lugansk.   

Estos informes dan cuenta de un control territorial e institucional efectivo por parte de Rusia y sus aliados locales en el sureste de Ucrania, al tiempo que dejan en evidencia la debilidad de las autoridades de Kiev en un eventual proceso de negociación.  

De acuerdo con los datos disponibles, las fuerzas leales a Zelenski no han alcanzado a frenar el avance de Rusia sobre el Donbás y más allá. En términos de política exterior, tampoco los países occidentales que respaldan a Ucrania han conseguido un respaldo mayoritario a las sanciones y vetos contra Moscú.  

En América Latina, donde la influencia estadounidense es histórica, Washington no ha logrado que las naciones adopten masivamente la retórica de condenas, sanciones y señalamientos contra el Kremlin.  

Según fuentes de la inteligencia rusa –a las que los hechos otorgan credibilidad–, el tema se ha convertido un motivo de interferencia en las relaciones bilaterales y ha puesto en vilo el éxito de la Cumbre de las Américas, que se celebrará en pocos días en los Estados Unidos.  

Los presidentes latinoamericanos tratan de evitar este tema en los contactos con los funcionarios estadounidenses, según las agencias de inteligencia rusas. Por eso habría dejado de lado el tema antirruso en la Cumbre. 

Hasta un altísimo funcionario del gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro les dijo a Europa que se quedaron sin Rusia y que podrían quedarse sin América Latina. 

Cifras y datos

Durante el análisis, especialmente en los reportajes utilizados como material de apoyo, se presentaron cifras y datos significativos: 

-95% de la región de Lugansk ya está en manos de Rusia. 

-6000 mercenarios extranjeros han sido identificados en Ucrania.

-2000 nacionalistas y mercenarios se rindieron en Mariúpul. 

-30 biolaboratorios ubicados en suelo ucraniano participaban en programas de EE.UU. 

-20 países envían armas a Ucrania para prolongar el conflicto.

-18 800 personas, incluyendo 2822 niños, fueron transportados por Rusia a lugares seguros en Donestk y Lugansk.

-12 unidades militares nuevas puso en servicio Rusia ante la expansión de la OTAN a Finlandia.  

-La intensidad de los vuelos espías y estratégicos de la OTAN en las fronteras rusas se ha elevado 15 veces respecto 2014. 

-42% ha aumentado el nivel de entrenamiento del distrito militar occidental ruso.

-300 ejercicios de combate se han realizado en lo que va de año.

-6 misiones sospechosas de buques estadounidenses con misiles guiados, se han detectado cerca de Kaliningrado. 

-24 actividades sospechosas se han descubierto desde 2016 por el sistema de defensa ruso.

-El dólar cayó por debajo de los 56 rublos por primera vez desde febrero de 2018.  

-El euro cayó a menos de 58 por primera vez desde junio 2015. 

-Según el viceprimer ministro de Rusia, Alexandr Nóvak, la producción petrolera del país se reducirá 9% respecto a 2021.  

-Cerca de la mitad de las empresas europeas están pagando a Rusia en rublos. 

-Grecia importa de Rusia entre el 45% y el 55% de todos sus requerimientos de gas.

-La inflación acumulada en Rusia en 2022 alcanza el 11%. 

-12.000 artefactos explosivos se retiraron de la zona portuaria al sur de Ucrania, además de embarcaciones y objetos hundidos.

-70 barcos de carga extranjeros pertenecientes a 16 países, tienen semanas retenidos en seis puertos de Ucrania, incluyendo los de Jersón y Odesa.  

-En 2021, China encabezó la producción mundial de trigo con casi 137 millones de toneladas métricas. Le siguen India con 109 millones 520 mil; Rusia, con 75 millones 500 mil y Ucrania aparece en la sexta posición con 33 millones de toneladas métricas. 

Materiales audiovisuales difundidos

En el programa se difundieron los siguientes materiales audiovisuales. 

Videos y reportajes de teleSUR:

-Balance de los 90 días de guerra en Ucrania. 

-Rusia continúa estudiando propuesta de Italia para alcanzar la paz en Ucrania. 

-Rusia anuncia creación de unidades militares en respuesta a amenazas de la OTAN.  

-Occidente apuesta a la prolongación de la guerra.   

-Balance medidas económicas de Rusia.  

-Gobierno de Rusia asegura compra de petróleo por Europa pese a sanciones económicas.  

-Importadoras griegas comenzarán a pagar el gas ruso en rublos.  

-Declaraciones de Vladímir Putin.   

-Armada de Ucraniana bloquea a buques turcos en Odesa.  

-Rusia está dispuesta a abrir corredor humanitario en puertos de Ucrania.  

-Fuerzas armadas de Rusia abren corredores humanitarios en puertos ucranianos.  

-Rusia ofrece facilidades de nacionalización a ucranianos del sur.  

-Rechazo de países latinoamericanos hacia sanciones de EEUU contra Rusia.  

Otras fuentes: 

-Video del programa En la Pista de LaIguana.TV Samuel Moncada enumera todas las agresiones a Venezuela desde 2018 planeadas por Guaidó y Trump. 

-Video de Al Mayadeen más armas para Ucrania para extender la guerra. 

-Video de CGTN en el que Vlodimir Zelenski asegura que las conversaciones con Rusia «se celebrarán indudablemente. 

-Video de reflexiones Ramón Grosfoguel en Desde donde sea. 

-Video del canal de Luigino Bracci con la intervención del embajador Samuel Moncada.  

Preámbulo sobre Venezuela

Antes de abordar del tema central de la investigación, Pérez Pirela ofreció información del día sobre Venezuela, al reseñar la intervención ante la Asamblea Nacional del representante permanente del país ante las Naciones Unidas, Samuel Moncada.  

El embajador presentó un informe pormenorizado de las agresiones emprendidas por Estados Unidos, el gobierno de Colombia y agentes locales de la oposición extremista para derrocar al presidente Nicolás Maduro.  

Con base en lo confesado por altos funcionarios de la Administración Trump, Moncada enumeró más de una veintena de planes que abarcaron desde invasiones militares, incursiones con mercenarios, sabotajes contra instalaciones eléctricas y petroleras, robo de activos, cerco financiero y financiamiento de bandas armadas en la capital venezolana.  

“Nunca antes en la historia de Venezuela habíamos estado tan cerca de una invasión. Las opciones fueron una intervención militar directa de EE.UU.”, aseguró Moncada. 

En su participación ante el Poder Legislativo, el diplomático reveló datos como que el empresario mercenario Jordan Goudreau afirmó que estuvo a punto de perder el contrato para la invasión a Venezuela porque la dirigencia del llamado gobierno interino estaba negociando con un señor llamado Erik Prince, de otra empresa de mercenarios, Blackwater, una de las más grandes del mundo, famosa por matar a miles de personas en Irak. “Esta empresa quería 500 millones de dólares por invadir con 5 mil hombres, pero los dirigentes opositores prefirieron a la empresa de Goudreau que cobraría 220 millones por un ataque con mercenarios desde Colombia”. 

Subrayó Moncada que entre las modalidades criminales que se aplicaron o estuvieron en debate se cuentan el ataque con tropas regulares estadounidenses; el ataque con tropas colombianas; el ataque militar multinacional; el ataque militar disfrazado de operación humanitaria; las operaciones encubiertas simulando lucha antidrogas; los sabotajes a servicios públicos esenciales; el financiamiento a bandas criminales para iniciar olas de violencia y ocultar otras operaciones; las operaciones de ciberterrorismo; la presión militar con aviones espías; las operaciones psicológicas contra la Fuerza Armada Nacional Bolivariana; el robo de activos; el secuestro de barcos petroleros sobornando capitanes, y todo ello en medio de la peor pandemia que haya vivido la humanidad en más de un siglo.  

Pérez Pirela comentó que “la idea era matarnos por hambre y necesidad, querían caotizar y neurotizar a la gente hasta lograr una guerra civil, tal como ocurrió en Libia o Siria. Afortunadamente el pueblo venezolano resistió todas esas embestidas”. 

Seguidores en YouTube

El moderador destacó que el canal YouTube de LaIguana.TV se encontraba a punto de llegar al hito de 200 mil seguidores. “Se lo agradecemos a ustedes en el alma”, expresó.  

(LaIguana.TV)