La Rada Suprema —el Parlamento de Ucrania— votó este martes a favor de la destitución de la defensora del pueblo del país, Liudmila Denísova, momentos después de expresarle su desconfianza.

El diputado Yaroslav Zhelezniak escribió en su cuenta de Telegram que la decisión fue apoyada por 234 de un total de 450 legisladores.

Antes de votar sobre la destitución, los legisladores abordaron la actividad de la funcionaria. Según Pável Frolov, diputado del partido gobernante Servidor al Pueblo, desde el inicio del conflicto Denísova «casi no ha cumplido con sus funciones de organización de corredores humanitarios, defensa e intercambio de prisioneros, oposición a la deportación de gente y niños de los territorios ocupados y otras actividades de defensa de los derechos humanos». Asimismo, afirmó en su perfil de Facebook que la viceprimera ministra del país, Irina Vereschuk, tuvo que hacerse cargo de esas labores.

Además, Frolov acusó a Denísova de centrar su trabajo con los medios de comunicación en ofrecerles «numerosos detalles de ‘crímenes sexuales cometidos de manera antinatural’ y ‘violaciones de niños’ en los territorios ocupados que no pudo confirmar con evidencias». En su opinión, estas acciones «solo le hicieron daño» a Ucrania y desviaron la atención mediática de las necesidades reales del país.

Asimismo, el diputado criticó que la funcionaria pasó mucho tiempo en el extranjero, pero no en Rusia o Bielorrusia, donde podría haber ayudado a los prisioneros ucranianos, sino en regiones «cálidas y tranquilas» de Europa.

Respecto a su destitución, Denísova afirmó este lunes que esa acción sería «una violación» de la Constitución del país, sus leyes, así como de «las reglas del derecho internacional».

Presuntos casos atroces denunciados por Denísova

Como defensora del pueblo, Liudmila Denísova, denunció en repetidas ocasiones presuntos casos de violencia sexual, que, según sus palabras, fueron cometidos por militares rusos contra civiles ucranianos. «Rusia usa la violación y otras formas de violencia sexual como tácticas de guerra sistemáticamente, en todas partes y con una brutalidad llamativa», escribió la semana pasada en su canal de Telegram.

Numerosas denuncias de Denísova eran sobre presuntos delitos sexuales contra menores, incluso de solo varios meses de edad, que fueron cometidos delante de sus madres. De acuerdo con sus palabras, un niño de 11 años fue violado durante 10 horas, mientras que su madre, atada a una silla, tuvo que observarlo. En otra ocasión, la comisionada dijo que una chica embarazada, de 16 años, y su abuela, de 78, fueron violadas simultáneamente, tras lo cual la joven perdió a su hijo. Asimismo, aseveró que los militares rusos usaron también diversos objetos para cometer sus crímenes, como una vela o una cucharilla.

Pese a no presentar pruebas, algunas de sus declaraciones fueron difundidas ampliamente, inclusive por medios internacionales como The Guardian, la BBC y la CNN.

(RT)