Los países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+) informaron de su decisión de incrementar de forma más intensa la producción de crudo el próximo julio hasta los 648.000 barriles diarios (b/d), en lugar del crecimiento mensual previsto de 432.000 b/d.

«Adelantar el ajuste de productividad global planificado para septiembre y redistribuir equitativamente el aumento de producción de 432.000 b/d durante julio y agosto de 2022. Por lo tanto, la producción de julio se ajustará al alza en 648.000 b/d según el cronograma adjunto», dice el comunicado.

Además, en la 29 reunión de la OPEP+, celebrada este 2 de junio por videoconferencia, se decidió «reconfirmar el plan de ajuste de la producción y el mecanismo de ajuste de la producción mensual aprobados en la 19 reunión», que se realizó el 18 de julio de 2021.

Otro de los puntos fue «extender el período de compensación hasta finales de diciembre de 2022 según lo solicitado por algunos países de bajo rendimiento», así como pedir que esos Estados «presenten sus planes antes del 17 de junio» del año en curso.

«Los planes de compensación deben presentarse de acuerdo con la declaración de la 15 reunión ministerial de la OPEP+», subraya la nota.

Por último, se decidió «reiterar la importancia crítica de adherirse a la conformidad plena y al mecanismo de compensación», así como celebrar la 30 reunión ministerial de la OPEP+ el próximo 30 de junio.

Por su parte, el viceprimer ministro ruso, Alexandr Nóvak, calificó de correcta la decisión de aumentar la producción hasta 648.000 b/d, ya que «igualará el mercado y garantizará el equilibrio entre la oferta y la demanda».

«El incremento que estaba previsto para septiembre, se dividirá en partes iguales entre julio y agosto de este año. Esto significa que en julio el aumento total será de 648.000 b/d, previamente estaba previsto que fuera de 432.000 b/d. En consecuencia, también habrá 216.000 b/d adicionales para agosto», especificó.

Nóvak explicó que la decisión se tomó «para satisfacer la creciente demanda», pues en verano boreal aumenta la demanda y «se incrementa la carga de las refinerías de petróleo» debido al activo uso de vehículos, así como a los crecientes viajes aéreos.

En abril de 2020, los países miembros de la OPEP y diez productores independientes (Azerbaiyán, Bahréin, Brunéi, Kazajistán, Malasia, México, Omán, Rusia, Sudán y Sudán del Sur) anunciaron un recorte petrolero para estabilizar el mercado tras el desplome de los precios debido al exceso de oferta y el impacto del coronavirus.

El ajuste, fijado en un principio en 9,7 millones de barriles diarios (mb/d), entró en vigor en mayo de 2020 y se fue flexibilizando a medida que se estabilizaba la situación, hasta bajar a 5,76 mb/d en julio de 2021.

En mayo pasado, la OPEP junto con los productores independientes se comprometieron a aumentar la producción en 432.000 b/d.

Sin embargo, varios países de la OPEP+, en particular Nigeria, Guinea Ecuatorial, el Congo y Angola, por motivos de una disminución natural de la producción o problemas técnicos, simplemente no pueden aumentar la producción al nivel que se les permite.

(Sputnik)