La Unión Europea calificó como «inaceptables» los ataques que recibiera el exdiputado Juan Guaidó el pasado sábado, cuando fue echado por un grupo de ciudadanos –presumiblemente militantes de su partido, Voluntad Popular– de un restaurante propiedad de la gobernación de Cojedes, según consta en un comunicado difundido este miércoles por la Oficina de Asuntos Exteriores y Política de Seguridad del bloque.

«Esperamos una pronta investigación para que los perpetradores sean llevados ante la justicia», reza parte del documento, en el que también se recuerda que «respetar a todos los actores políticos y civiles, incluidos los miembros de la oposición y los periodistas, es clave para promover el diálogo venezolano».

Asimismo, Bruselas aprovechó la ocasión para subrayar que continúa respaldando «a todas las fuerzas que defienden la democracia en Venezuela» e indicó que «la única salida a la crisis actual es a través de una negociación política liderada por Venezuela que conduzca a elecciones presidenciales y parlamentarias creíbles, inclusivas y transparentes», unas demandas que se corresponden exclusivamente con las que exige el sector de la oposición al que pertenece Guaidó.

Estas declaraciones se suman a las externadas por el secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, quien el pasado domingo manifestó que era el segundo ataque que recibía el exparlamentario –al que Washington insiste en seguir llamando «presidente interino»– en pocas semanas y aseguró que en la Casa Blanca existía profunda preocupación por estos hechos.

El 11 de junio, un grupo de ciudadanos expulsó con gritos, empujones y sillazos al exdiputado de un local, sin que su equipo de seguridad hiciera mayor cosa para impedirlo y ninguna persona intentara apaciguar los ánimos. Semanas atrás sucedió algo semejante en una cancha de Maracaibo (Zulia). En ambos sitios, tanto el gobierno regional como el municipal están en manos de la oposición.

(LaIguana.TV)