El presidente de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, Jerome Powell, reconoció este miércoles que la inflación «sorprendió» a las autoridades monetarias y advirtió que puede haber «otras sorpresas».
En un discurso ante el Congreso, Powell aseguró que la economía estadounidense es lo suficientemente sólida «para enfrentarse a un endurecimiento monetario» o ajuste al alza de las tasas de interés.
«Obviamente, la inflación ha sorprendido (…) durante el último año, y podrían esperarse más sorpresas», dijo Powell ante una comisión del Senado, cuando la subida de los precios alcanzó un pico en 40 años en Estados Unidos con un 8,6% interanual a mayo; según el índice CPI de precios al consumo.
Recordó que la Fed subió sus tasas de referencia en las últimas tres reuniones, un total de 1,5 puntos porcentuales.
El comité monetario «cuenta con que las tasas sigan subiendo», advirtió; y el ritmo «dependerá de los datos económicos».
«Francamente, los eventos de los últimos meses en el mundo hacen más difícil para nosotros lograr lo que queremos hacer, (que es) alcanzar una inflación de 2% conservando un sólido mercado laboral», indicó Powell, quien destacó además el «desajuste» en el mercado de trabajo, «con más ofertas de empleos que candidatos».
«Saber si lograremos» controlar la inflación sin caer en recesión «dependerá en cierta medida de factores que no controlamos», añadió.
Sin embargo, indicó que existen todavía «caminos para bajar la inflación a 2% sin provocar consecuencias tan problemáticas».
Powell aseguró que la comunicación del banco central será «lo más clara posible».
En su última reunión, a mediados de junio, el comité monetario subió las tasas en 0,75 puntos porcentuales; un aumento inédito en casi 28 años.
«Nos esforzaremos por evitar agregar incertidumbre a un periodo que ya es extraordinariamente difícil e incierto», prometió. Pero, «en un entorno económico que cambia rápidamente, nuestra política se ha adaptado y seguirá haciéndolo».
Economía «muy sólida»
Entre las causas de la inflación Powell citó «el aumento en los precios del crudo como resultado de la invasión de Ucrania por parte de Rusia» y «los confinamientos por el covid-19 en China», pero los republicanos consideran que la política monetaria de la Fed ha sido demasiado laxa durante mucho tiempo.
El organismo mantuvo tasas cercanas a cero para impulsar la economía durante la pandemia.
«La inflación también ha aumentado rápidamente en muchas economías extranjeras», insistió.
Powell describió una economía estadounidense todavía «muy sólida».
«Los indicadores sugieren que el crecimiento del producto interno bruto real se aceleró este trimestre, y el gasto de consumo se mantuvo fuerte», dijo, después de que el PIB se contrajera en el primer trimestre en proyección anual, la medida preferida en Estados Unidos, que compara el PIB con el trimestre anterior y, según las condiciones al momento de la medición, proyecta el crecimiento estimado en 12 meses.
En la comparación con el primer trimestre de 2021 en cambio, el PIB registró una expansión de 3,5%. Y trimestre sobre trimestre, se observa una contracción de 0,4% entre el primer cuarto de 2022 y el último de 2021.
La inversión de las empresas mengua y el mercado inmobiliario tampoco atraviesa su mejor momento, «reflejando en parte las tasas hipotecarias más altas», matizó el titular de la Fed.
«El endurecimiento de las condiciones financieras (…) debería seguir moderando el crecimiento y contribuirá a equilibrar mejor la oferta y la demanda», afirmó.
El presidente de la Reserva Federal reconoció que un rápido aumento en las tasas podría desencadenar una recesión.
«No es en absoluto el resultado deseado pero ciertamente es una posibilidad», respondió a un congresista.
Los expertos económicos agitan cada vez más el espectro de una recesión, debido a que la subida de las tasas de interés condiciona los créditos.
La propia Casa Blanca está preocupada por el riesgo de recesión pero al mismo tiempo asegura que los cimientos de la economía se mantienen sólidos para afrontarlo.
«Es evidentemente una preocupación, pero la columna vertebral de nuestra economía sigue siendo fuerte», dijo el martes la asesora económica Cecilia Rouse.
Janet Yellen, secretaria del Tesoro, aseguró por su parte el domingo que no creía que una recesión fuera «inevitable», aunque reconoció que prevé que «la economía se desacelere» como parte de una transición hacia un «crecimiento lento y estable».
(AFP)