Robert Gates, secretario del Departamento de Defensa de EE.UU. de 2006 a 2011, considera que hay pocas probabilidades de que China ataque a Taiwán, según declaró durante una entrevista para el pódcast ‘One Decision’ publicada este jueves.

«Personalmente, creo que la probabilidad de una invasión a gran escala es muy baja. Los chinos nunca han llevado a cabo una operación anfibia. Sería algo como el Día D (el desembarco en Normandía de los Aliados durante la Segunda Guerra Mundial), tendría que ser enorme, y requeriría mucho ablandamiento», subrayó Gates.

Sin embargo, el exjefe del Pentágono señaló que Pekín dispone de otras medidas para «ejercer una enorme presión» sobre Taipéi «sin disparar un solo tiro». Según Gates, podría hacer uso de su potencial cibernético y económico. China «podría poner a Taiwán de rodillas y crear enormes incentivos para que Taiwán tenga una actitud muy diferente hacia China«, recalcó.

 

Mientras, el Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán denunció esta misma jornada la incursión de 22 aviones del Ejército Popular de Liberación de China en el suroeste de la zona de identificación de la defensa aérea de la isla (ADIZ, en inglés).

Entre las aeronaves chinas que entraron en el espacio aéreo taiwanés figuran dos bombarderos estratégicos H-6, dos Y-8 de guerra antisubmarina, dos KJ-500 de alerta temprana y control aerotransportado, un Y-8 de guerra electrónica, diez cazas polivalentes J-16 y cinco cazabombarderos JH-7. La jornada anterior, la cartera de Defensa taiwanesa reportó sobre otra incursión en la que participaron un total de 29 aeronaves de combate chinos.

Taiwán se autogobierna con una administración propia y se muestra firme en su determinación de defender su soberanía con un «modo de vida democrático», mientras que Pekín considera a la isla como una provincia de la República Popular China, insistiendo en su política de una sola China y reiterando el discurso de la «reunificación» con el «errante que acabará volviendo a casa».

El 12 de junio, el ministro de Defensa de China, Wei Fenghe, afirmó en la conferencia internacional Diálogo de Shangri-la en Singapur que Pekín está dispuesto a luchar «hasta el final» si alguien intenta separar a Taiwán. «China trabaja con el máximo esfuerzo y sinceridad para garantizar la reunificación de forma pacífica, pero en caso de secesión, China se reserva otras opciones», aseveró Wei.

(RT)