El crudo Merey, referencia venezolana en la cesta petrolera de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) registró un precio promedio de 88,02 dólares por barril el pasado mes de mayo, según consta en un informe oficial publicado por el organismo este lunes. 

Siempre siguiendo esta fuente, el alza supone un incremento de 5,6 % en relación con los 83,6 dólares reportados en abril y de 79,13 % con respecto a junio de 2021. 

En relación con la producción, el documento precisa que Venezuela está extrayendo 735.000 barriles de crudo por día, luego de haber computado en promedio 636.000 barriles diarios en 2021.

Entretanto, la cesta global de la OPEP, que contiene 13 tipos de crudo, promedia 113,87 dólares por barril (8,23 % más que en abril de 2022), en razón de la crisis derivada de la imposición de medidas coercitivas unilaterales por parte de Estados Unidos, la Unión Europea y otras naciones contra el petróleo ruso. 

La diferencia porcentual entre la cesta y el crudo venezolano obedece a dos razones: por un lado, el Merey es un crudo extrapesado de 16º API, por lo que su costo de procesamiento es mayor; de otro, las rebajas con las que Caracas debe ofrecer sus hidrocarburos en el mercado internacional para sortear medidas coercitivas unilaterales estadounidenses. 

Empero, la estimación de los especialistas es que los precios sigan creciendo por causa de las sanciones contra el crudo de los Urales, aún a pesar de que el bloque OPEP+ (del que también forma parte Rusia) ha aumentado gradualmente la oferta, Estados Unidos ha echado mano de su reserva estratégica y se prevé una reducción estacional de la demanda por efecto del verano boreal. 

En ese orden, de acuerdo con informes de la prensa francesa en la que se citan fuentes del Eliseo, desde el gobierno encabezado por Emmanuel Macron estarían impulsando que Irán –otro país OPEP sancionado por las naciones occidentales– y Venezuela incrementen «excepcionalmente» su producción para abastecer el mercado internacional y estabilizar los precios. 

Si se concretara esta propuesta de París, Washington tendría que echar marcha atrás a un conjunto de coerciones que ha impuesto sobre Irán y Venezuela, aunque de momento esta versión no ha sido corroborada por ningún vocero de la Casa Blanca. 

(LaIguana.TV)