Gustavo Petro y Francia Márquez fueron electos como presidente y vicepresidenta de Colombia, lo que representa una victoria para diversos sectores de la sociedad colombiana, especialmente el campesinado y las comunidades originarias de territorios con vastas riquezas naturales.

En una nueva entrega de Entre Líneas, la investigadora y comunicadora Naile Manjarrés hace un recuento de lo que ha significado la lucha por la preservación del territorio colombiano y de su soberanía por parte de la vicepresidenta Francia Márquez, una lucha que también hace parte del plan de gobierno que refiere Gustavo Petro en función del desarrollo económico de Colombia y que encuentra oposición en la élite política, los medios de comunicación y más de cien transnacionales.

Una Colombia capitalista

En palabras del presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, el país está atrapado en un sistema económico y productivo de carácter feudal que debe ser transformado radicalmente en función de abandonar lógicas rentistas y netamente extractivistas. 

En este aspecto, el programa de gobierno de Petro y Márquez apuesta por la restitución de tierras para comunidades que viven y producen alimentos en departamentos históricamente expoliados por su riqueza en carbón como el Cauca, la Guajira y César.   

(LaIguana.TV)