El presidente de Sri Lanka, Gotabaya Rajapaksa, designó al actual primer ministro, Ranil Wickremesinghe, como presidente interino encargado de la nación; tras confirmar la Fuerza Aérea esrilanquesa su huida en un avión militar con destino a Maldivas.

La designación de Wickremesinghe fue informada por el presidente del Parlamento en conferencia de prensa, justo el día en el cual se esperaba se hiciera efectiva la dimisión de Rajapaksa, en medio del clima de protestas multitudinarias que vive ese país asiático.

Detalló la Fuerza Aérea que Rajapaksa “a solicitud del Gobierno, con la aprobación del Ministerio de Defensa, y bajo las normas y reglamentos de Inmigración y Emigración(…) se asignó un avión, perteneciente a ese cuerpo” en el cual viajó junto a su esposa y otros dos miembros del personal de seguridad”.

Tras su arribo a Malé, capital de Maldivas, se desconoce hacia donde fue trasladado Rajapaksa; al tiempo que medios locales señalaron que otros miembros de la familia y ocupantes hasta entonces de altos cargos en el Gobierno, también han intentado abandonar el país en medio del clima de manifestaciones.

Con anterioridad el mandatario había escapado el pasado sábado de su residencia en Colombo, horas antes de que miles de personas la asaltasen para exigir respuestas ante la grave crisis económica e institucional que sufre la nación.

Ante tal clima de inseguridad, los partidos políticos de Sri Lanka habían acordado designar a un nuevo presidente interino el próximo 20 de julio para cubrir el vacío de poder dejado tras la salida de Rajapaksa.

En medio de este clima de inseguridad, Ranil Wickremesinghe, declaró el estado de emergencia en el país, decisión acompañada por un toque de queda en Colombo, provincia considerada su capital comercial.

Esta medida desató la movilización de manifestantes en las inmediaciones de la oficina del primer ministro para exigir su renuncia; protestas las cuales la Policía intentó dispersar con el empleo de gases lacrimógenos.

La situación ha conllevado a la ocupación de varios edificios gubernamentales por parte del pueblo para exigir la renuncia de sus principales líderes, y manifestar su descontento frente a la profunda crisis existente.

(teleSUR)