El Gobierno húngaro decreta el estado de emergencia en el sector de energía, anunció el jefe de la oficina del primer ministro, Gergely Gulyás. En este contexto, indicó, el país prohíbe las exportaciones de productos energéticos y leña.
«Para proteger a las familias húngaras y el abastecimiento eléctrico, el Gobierno húngaro, como muchos otros países, declara el estado de emergencia en el sector energético», dijo en una rueda de prensa, transmitida por la cadena M1.
Gulyás agregó que es muy probable que Europa no tenga gas suficiente para la temporada de otoño y invierno boreales.
La Unión Europea se ha planteado el objetivo de llenar los almacenamientos de gas del bloque comunitario al 80% antes del 1 de noviembre, ante el temor del posible cese completo de los suministros de ese combustible desde Rusia.
No obstante, el gigante ruso Gazprom ha reducido el uso de la capacidad del gasoducto Nord Stream 1 –la principal vía de suministro a la región europea– debido a que una de sus turbinas estaba paralizada en Canadá, a donde se la habían enviado desde Alemania para ser reparada. El pasado 11 de julio, la compañía rusa anunció la suspensión de todas las operaciones del gasoducto por labores de mantenimiento anuales.
A pesar de que la turbina ya fue devuelta desde Canadá y Gazprom asegura que las obras de mantenimiento de Nord Stream 1 finalizarán el 21 de julio, la Comisión Europea ya ha advertido que los países de la Unión deben mantenerse preparados «para cualquier acontecimiento».
(Sputnik)
