El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, agradeció los comentarios sobre su reunión con su homólogo de EEUU, Joe Biden, de parte del mandatario venezolano, Nicolás Maduro, y del excandidato izquierdista a la presidencia francés, Jean-Luc Mélenchon, además de elogiar a su par argentino, Alberto Fernández.

«Les agradezco mucho a los dos sus comentarios, hay muy buenos dirigentes en América Latina, personajes que yo veo con mucho respeto. Es el caso de Alberto Fernández, presidente de Argentina, es una persona con convicciones, honesto, muy preparado, con oficio político y (…) con dimensión social», respondió López Obrador en conferencia de prensa a una pregunta sobre el tema.

Maduro considera que en el encuentro celebrado en la Casa Blanca el gobernante mexicano sostuvo «una posición sólida, clara, diplomática, y firme», sobre los temas de la vida económica, migración, vida social, y la relación política.

Por su parte, el líder de la coalición izquierdista francesa Nueva Unión Popular Ecologista y Social (Nupes), expresó después de una reunión en Palacio Nacional con López Obrador, la tarde del 14 de julio, que le gustaría que el líder mexicano «asumiera un liderazgo, no solo en América Latina, para que haya un punto de vista no alineado» en el mundo.

Ejemplos de Evo y Lula

El jefe de Estado también se refirió al contenido popular de los liderazgos del expresidente boliviano Evo Morales, (2006-2019), de su sucesor Luis Arce, y del expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011), favorito a ganar las elecciones del 2 de octubre próximo.

Durante las presidencias de Morales, como Arce como ministro de Economía, «Bolivia fue el país con más crecimiento en América», prosiguió.

También dijo que después del golpe de Estado, en noviembre de 2019, en Bolivia se celebraron elecciones y volvió a ganar el Movimiento Al Socialismo (MAS).

«Los que votaron por Luis Arce fueron los más pobres, los indígenas, fue un ejemplo, porque los conservadores siempre sostienen que el pueblo no agradece», recordó.

Cuestionó además el uso de dichos populares, como «el que se mete a redentor termina crucificado», que él considera parte de una «mentalidad conservadora», por suponer que el pueblo que no agradece; y otro que reza «dime con quién andas y te diré quién eres».

«Cuando pensaron los conservadores golpistas, antidemocráticos, racistas, que ya habían dominado con la campaña mediática contra lo que representaba Evo, llamaron a elección (…), y ganó el movimiento, ganaron los pobres, la gente humilde», expresó.

Recordó además que, en el marco de la revolución mexicana de principios del siglo XX, «el conservadurismo derrotó al movimiento democrático y asesinaron al presidente [Francisco] Madero», en 1915.

Sobre su prócer favorito, el mandatario mexicano relató que «se quedó solo y cuando se produce la inestabilidad política, auspiciada por el conservadurismo, tuvo que apoyarse en los mismos militares porfiristas [del dictador Porfirio Díaz], que son los que lo traicionan y lo asesinan».

La lección de esos acontecimientos es que «hay que apoyarse en el pueblo, porque sí es agradecido», puntualizó.

También recordó una reunión reciente que sostuvo en marzo pasado con el líder brasileño Lula, a quien considera como víctima de acusaciones falsas que lo llevaron a la cárcel.

«Todo era falso, ahora está en libertad, platicamos, es un hombre excepcional, extraordinario, fraterno, vigoroso», porque ser joven o viejo tiene que ver con el ánimo de las personas, agregó.

López Obrador considera que Lula es ahora «muchísimo mejor que antes, como dirigente es admirable».

Aunque indicó que prefería no comentar más sobre el brasileño, porque se avecinan las elecciones presidenciales de octubre próximo, señaló que Lula «es una alternativa, una bendición para ese país» sudamericano.

«Hay ahora un despertar de conciencias en toda América, y muy buenos dirigentes. Esto ayuda, porque al mismo tiempo se están enfrentando calamidades, como la pandemia, los efectos de la guerra y todas las crisis afectan más a la gente humilde y pobre», puntualizó.

El mandatario finalizó su exposición sobre la política latinoamericana subrayando que si los gobiernos están en manos de gobernantes sensibles, los efectos nocivos de las crisis se pueden atemperar.

(Sputnik)